A qué jubilados y pensionados alcanzará el pago del bono de hasta $10.000

Los titulares de la Asignación Universal por Hijo ( AUH) recibirán, por única vez, un bono de 2000 pesos antes de fin de año, y los jubilados y pensionados que perciben el haber mínimo cobrarán, también a modo de pago excepcional, 5000 pesos antes del 31 de diciembre y otros 5000 pesos en enero.
Los desembolsos de emergencia se anunciaron en simultáneo al envío del proyecto que llegará hoy al Congreso, que propone suspender la actual fórmula de actualización de jubilaciones, pensiones y programas sociales, y la creación de una comisión que tendrá 180 días para determinar un nuevo índice.
Hasta que se elabore una nueva fórmula de movilidad, el Gobierno dispondrá aumentos por decreto de montos fijos, que alcanzarán a todas las jubilaciones y pensiones, lo que provocará un achatamiento de la pirámide.
La comisión para elaborar el nuevo índice estará integrada por representantes del Poder Ejecutivo, del Congreso y de la Anses, detallaron funcionarios que conocen la iniciativa. En diálogo con el periodista Reynaldo Sietecase, Alberto Fernández detalló además que esta semana se pondrá en marcha la primera etapa del plan Alimentar. Consiste en la entrega de una tarjeta a titulares de la AUH destinada solo a comprar alimentos.
El programa empezará a instrumentarse en Concordia, Entre Ríos, la ciudad más pobre del país, según la última medición del Indec.
Las mujeres con más de tres meses de embarazo y las titulares de AUH con un hijo podrán gastar hasta 4000 pesos, en tanto que las que tienen dos hijos o más dispondrán de 6000 pesos por mes.
La instrumentación del programa en Concordia alcanzaría a 6500 titulares de AUH y significaría un desembolso de 35 millones de pesos en alimentos solo en el primer mes, puntualizó el Presidente.
En paralelo a la instrumentación del plan Alimentar, el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, prepara la primera reunión formal del Consejo Federal Argentina contra el Hambre.
El encuentro será el viernes en la Casa Rosada, con la presencia de Alberto Fernández. Para coordinar el despliegue federal de la iniciativa, el ministro se reunió ayer con sus pares de las provincias.
La idea es que esos encuentros se repitan cada dos meses.

Con estos anuncios, Fernández cumple con una de sus promesas de campaña: iniciar el camino de la recomposición del poder adquisitivo de los sectores más pobres, o, como él dice, «poner plata en el bolsillo de la gente».