Carta del Lector

Una vez más…
Hace unas semanas atrás, más precisamente un domingo a la tardecita, mientras disfrutábamos en familia de unos mates, nos robaron la camioneta de la puerta de nuestra casa. Jamás imaginamos que podía pasar esto en nuestra ciudad, nos llevó unos minutos caer en que había sido un robo y que nuestra amada chata no estaba más. Enseguida llamamos a la policía, difundimos fotos en redes sociales, pero hasta el momento estamos sin noticias. Agradecemos a las personas que enseguida se comunicaron con nosotros y a las que nos ayudaron a viralizar la publicación, pero lamentablemente eso no fue suficiente: se precisaba de otros recursos con los que, pareciera ser, la ciudad no cuenta.
Al momento de tomarnos la denuncia, les insistíamos en que pidan cámaras al peaje y emitan una alerta: habían pasado pocos minutos desde que la camioneta había desaparecido de la puerta de casa. Pero en todo momento nos dijeron que había que esperar al día lunes para que dicho pedido lo emita la fiscalía interviniente. Al día siguiente, nos enteramos que las cámaras del peaje hacía 3 meses que se encontraban sin funcionar y la policía no contaba con móviles para salir a rastrear la ruta, motivo por el cual no sabemos cuál fue el rumbo de la camioneta.
A todo esto, del sector de seguridad se comunicaron con nosotros para hacernos llegar sus saludos y comentarnos que las cámaras no habían podido identificar al auto que acompañaba a la camioneta. Lo terrible de todo esto es que varias de las cámaras (que nosotros creemos que nos protegen) no funcionan y otras, por la mala definición que tienen, no captaron las imágenes, a lo que nos preguntamos ¿Cómo puede ser que las cámaras registren un vehículo para hacerle una multa o para cobrar el pase del peaje y no para un suceso como este?
Realmente nos sentimos desprotegidos. Las respuestas que nos dan son vergonzosas e irrepetibles, la investigación tiene trabas por todos lados y por cuestiones de absoluta precariedad no se pueden desbloquear.
Hoy como vecinos de este ciudad decimos ¡BASTA!. BASTA a esta inseguridad, BASTA a la desprotección, BASTA de conformarnos con que “sólo fue algo material y nadie resultó herido” o con el “qué suerte que tenían seguro”. Abramos los ojos Chascomús, pensemos que hace unos años nos alarmábamos por el robo de una moto y hoy ya lo asumimos como algo cotidiano. Esto va en aumento como lo ven atento a lo sucedido en los últimos días y parece no tener límites. Es lamentable, vecinos, que nuestra ciudad se haya convertido en esto y aún más dramático es no tener respuestas por parte de quienes creemos que nos representan. Hoy, una vez más, desgraciadamente nos tocó a nosotros pero ¿hasta donde vamos a llegar?

Darío Loredo y flia.
Darío R. Loredo
DNI 12.547.023