Deuda. Alberto Fernández: «Hay una posición tercamente dura de algunos fondos»

«El límite es que me exijan lo que suponga más padecimiento para los que más necesitan», dijo el presidente Alberto Fernández sobre la negociación de la deuda bajo legislación extranjera 

 

La negociación de la deuda bajo legislación extranjera es una de las cuestiones económicas que pretende resolver el gobierno del presidente Alberto Fernández, quien dijo hoy en una entrevista radial que se negocia sobre la última oferta que va a hacer su administración y que siguen «hablando con todos» para alcanzar un acuerdo. El mandatario reconoció que hay fondos con posturas «incomprensiblemente duras» y manifestó que su límite es que le exijan cuestiones que generen «padecimiento para los que más lo necesitan».

Fernández se refirió también a otras medidas de su gestión, como el desistir en el proyecto de expropiación de Vicentin o la reforma judicial y no se ahorró críticas para «la oposición que está en Twitter».

«Tenemos una posición muy dura de algunos fondos, incomprensiblemente dura, tercamente dura. Ellos ya saben que la nuestra fue la última oferta, que no podemos hacer más esfuerzos. Espero que comprendan que ni siquiera les estamos pidiendo que pierdan, les estamos pidiendo que ganen un poco menos», expresó el primer mandatario, quien sin embargo aseguró que siguen en diálogo con los acreedores y lo harán durante los días siguientes para tratar de alcanzar un acuerdo.

Sobre las características de esa negociación, puntualizó en que si acepta todo lo que los bonistas le piden, ya tiene «arreglado el tema de la deuda y cerrado el acuerdo», pero remarcó: «Si el acuerdo supone que los argentinos se posterguen más, no lo voy a hacer. Si supone que los jubilados tengan que tener mas ajuste, no lo pienso hacer. Si exige que deje de auxiliar a los nueve millones de argentinos del IFE, no lo voy a hacer. El límite es que me exijan lo que suponga más padecimiento para los que más necesitan». El mandatario admitió para radio El Destape no conocer el porcentaje de aceptación que tiene la oferta argentina.

Adiós a la expropiación de Vicentín

Ayer, Fernández publicó en su cuenta de Twitter la derogación del decreto que planteaba la expropiación de Vicentín. «No nos dejaron, nos pusieron todos los obstáculos. Me tuve que bancar cacerolas, tipos tocando la bocina, insultos en todos lados, letras escritas de que somos expropiadores y, finalmente, nunca me dejaron ver lo que había adentro de Vicentín y lo que pude conocer es muy preocupante», expresó, con énfasis en que la intención de su gobierno era rescatar a la firma: «Hicieron del rescate de una empresa una expropiación violenta. Y lo único que intentábamos era ver si podíamos salvarla y ponerla al servicio de la Argentina».

En ese mismo sentido, puntualizó que lo de YPF Agro fue una idea que «pensaron originalmente» y agregó: «Yo estatizar empresas privadas, no. Rescatar una empresa, sí. Salvar accionistas, no. La plata del Estado no está para salvar directivos. Nosotros no tenemos un problema con los actores privados del sector cerealero, nosotros queremos ver dónde están las picardías». El mandatario aceptó haber pensado que «el conflicto de Vicentín estaba «mucho más asumido en la sociedad santafesina» y reconoció: «Yo no medí adecuadamente».

Por último, reprobó la actitud del juez civil y comercial de Reconquista, Fabián Lorenzini. «Echó por tierra el DNU, no lo declaró como inconstitucional, pero hizo de cuenta que no existiera», comentó sobre él.

Las medidas económicas, con mirada regional
El Presidente aseguró tener un paquete de medidas económicas «listo», pero explicó: «Pedí que hablen con los gobernadores para tratar de que el plan tenga un mejor impacto regional. Por eso lo estamos demorando». Posteriormente, fue tajante con respecto al rol de una parte de la oposición: «Durante semanas estuvieron diciendo ‘hablan solo de la cuarentena’, ‘salgan de la cuarentena’, ‘se enamoraron de la cuarentena’. Presentamos un proyecto de reforma judicial y nos dicen ‘cómo van a presentar esto en medio de la cuarentena’. Ya veo que cuando presentemos las medidas económicas van a decir lo mismo».
En ese aspecto, aseguró que «es todo muy difícil en este país» y agregó: «Definamos bien el escenario en el que estamos. Se nota mucho lo que hacen y hay gente que honesta que ingenuamente creen en lo que están describiendo».

El rol de la oposición que no gobierna
Fernández prefirió no dar opiniones sobre el viaje del expresidente Mauricio Macri a Francia, pero sí dijo que «hay dos tipos de oposición» y se quejó de una parte de quienes la integran: «Los que gobernamos parece que no tuviéramos tantas diferencias conceptuales, tenemos diferencias ideológicas. Después están los de Twitter, que son los que arman cacerolazos, los que le hicieron creer a la gente que Vicentín era un acto de expropiación. Son los que frustran la salida de la Argentina», remarcó el mandatario y pidió que «reflexionen y adviertan el país que dejaron».
También, dijo: «¿Esos son los que ahora me explican cómo hacer las cosas? Lo mejor que podrían hacer es preservarse, guardarse un poco y entender que tuvieron un momento, hicieron lo que pudieron -no pudieron mucho- y lo que pudieron, pudieron mal. Tratamos de que nos dejen poner orden donde todo lo desordenaron».

La modificación de la Justicia y sus beneficiarios
Por último, Fernández se refirió al proyecto de reforma judicial que presentó durante la semana y remarcó que la comisión asesora le debe recomendar qué hacer con la Corte Suprema de Justicia de la Nación porque hay «muchos problemas de funcionamiento», pero aseguró que la discusión no está sobre el número de miembros del máximo tribunal: «Yo en campaña dije que la Corte no necesita más de cinco miembros. Esa no es la cuestión, esa es la cuestión que imponen».
En ese aspecto, volvió sobre la oposición de Juntos por el Cambio y admitió que «si alguien se puede beneficiar con la reforma judicial son los miembros del exgobierno». Sobre eso, comentó: «Con la reforma que propusimos, le garantizamos a Cambiemos que si ellos tienen que enfrentar procesos penales no les va a pasar lo que le pasó al gobierno de Cristina Kirchner. No lo vamos a permitir». Admitió que se compromete públicamente «a no hacer con ellos, lo que ellos hicieron con otros».
También criticó a quienes cuestionan la presencia del abogado de la vicepresidenta Carlos Beraldi dentro de la comisión asesora y cerró: «Sé que mis modos se chocan siempre con la hipocresía, pero me cuesta ser un hipócrita, porque no lo soy, simplemente por eso». (La Nación)