Un importante número de gajos de estas plantas centenarias fueron cortados sin respeto, transformado las casuarinas en formato palmera, largos troncos con follaje en altura
Si existía en Chascomús una linda senda para recorrer, era la que bajo las casuarinas del Parque Libres del Sur y sobre la Avenida Lastra se extendía desde la puerta del Museo Pampeano, hasta la costa de la laguna.
La cercanía de sus fuertes ramas arqueadas se transformaban en un cielo arbolado que generaba un cobijo natural al caminante.
Desde ayer todo eso terminó, un importante número de gajos de estas plantas centenarias fueron cortados sin respeto, transformado las casuarinas en formato palmera, largos troncos con follaje en altura.
Realmente un disparate, muy alejado del medio ambiente que el gobierno local dice defender y del patrimonio natural que afirma respetar.
Este accionar leñador, dirigido seguramente por alguien que jamás disfrutó ese hermoso sendero, se encuadra en los preparativos del que llamarán Paseo de Lalín, que ahora consistirá en una vereda reparada a las apuradas, algunos bancos, luces y árboles tronchados.
Vale resaltar finalmente que este “paseo” que se “inaugurará” el próximo lunes coincidentemente con el aniversario de Chascomús y la visita del Alcalde de Lalín, tampoco ha cumplido con los requisitos legales, habida cuenta que no cuenta con aprobación del Concejo Deliberante, que es la autoridad sobre el tema, dado que según la Ley Orgánica de la Municipalidades, artículo 27, inciso 3, le corresponde al Cuerpo Deliberativo reglamentar “La conservación de monumentos, paisajes y valores locales de interés tradicional, turístico e histórico”; inciso 14 “La sanidad vegetal en las situaciones no comprendidas en la competencia nacional y provincial” y también tiene injerencia de acuerdo al artículo 59, inciso b, en las obras públicas municipales de “ornato”, e inciso d en las de “cercos y veredas”.
