EDEA detectó fraude eléctrico en tres complejos de cabañas

El barrido completo por barrios que realiza personal especializado permitió constatar más de cien irregularidades.

Tres complejos de cabañas para uso turístico que funcionan en diferentes barrios de nuestra ciudad fueron detectados con fraude eléctrico por personal de EDEA, en el marco de la campaña contra el robo de energía que la distribuidora viene llevando a cabo con un equipo de trabajo especializado y el apoyo de operarios de la sucursal local. Las irregularidades, que en algunos casos sorprendieron por su alto grado de complejidad, se pudieron verificar a partir de acciones que comprendieron el barrido completo de suministros en los barrios Lomas Altas, Parque Girado, San Nicolás, Adela, Monasterio, Ruta 2 y 30 de mayo.
Respecto de las irregularidades halladas en los complejos de cabañas, la empresa indicó que en instalaciones ubicadas en Ruta 20, sus operarios, con vasta experiencia en este tipo de tareas, detectaron una conexión clandestina subterránea que posibilitaba que el importante consumo de energía demandado no fuera registrado por el medidor.
Otro de los complejos infraccionados se encuentra ubicado en el barrio Lomas Altas, en calle de los Álamos, donde se halló una conexión en la caja de toma, que evitaba que el medidor registrara la energía consumida. Desde la compañía eléctrica también se puso de relieve que en este mismo barrio se constataron otros 46 casos de robo de energía con diversas modalidades.
El tercero de los complejos de cabañas con fraude eléctrico funciona en el barrio Parque Girado, en la calle del Encuentro. En este caso se encontró una conexión directa en el pilar, que eludía la medición de la energía consumida.
Como es de rigor en este tipo de ilícitos, los propietarios además de ser demandados penalmente, deberán pagar la energía consumida y no registrada.
La empresa eléctrica informó que con la implementación de este método de trabajo se han encontrado en los últimos meses más de un centenar de irregularidades, entre las que se incluye un importante número de conexiones directas sin medidor que, tras la regularización del suministro, son retiradas dado el peligro que significa no solo para los autores del fraude sino también para los ocasionales transeúntes.
Las autoridades de EDEA expresaron que está previsto seguir con este tipo de inspecciones en lo que resta del año de manera sostenida y con igual modalidad de trabajo en distintos barrios de Chascomús y con los posteriores controles a efectos de evitar posibles reincidencias.