Juntos por el Cambio busca su perfil opositor en medio de la compulsa por el liderazgo

 

Mientras Mauricio Macri busca recuperar su protagonismo político, la figura de Horacio Rodríguez Larreta emerge como referente del ala más moderada del polo opositor.

Juntos por el Cambio (JxC) delinea su perfil opositor en medio de la compulsa interna por el liderazgo del espacio, evidenciada en la decisión del expresidente Mauricio Macri de recuperar protagonismo justo cuando el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se configura para muchos como el nuevo líder de la alianza que comparten el PRO, la UCR y la CC-ARI.

La reunión semanal de la Mesa Nacional de Juntos por el Cambio celebrada este lunes fue el escenario de la, por ahora, subterránea pulseada entre el mandatario porteño y el expresidente, quien participó por segunda vez de un cónclave de la alianza opositora desde que volvió de su viaje por Europa.

Desde su regreso al país, Macri busca recuperar su protagonismo político, intensificando sus contactos políticos y su presencia mediática.

La semana pasada, aún cuando no había cumplido los 14 días de cuarentena obligatoria, el expresidente recibió en su quinta Los Abrojos a un grupo de intendentes bonaerenses y ayer domingo publicó una columna de opinión en el diario La Nación con duras críticas al Gobierno nacional, que no cosechó una mirada unificada en JXC en torno a la forma y la oportunidad de su mensaje.

Macri pretende recuperar su liderazgo.

De hecho, en la reunión de hoy no se habló del texto, que bajo el título, «Para defender el presente y ganar el futuro», publicó Macri, donde acusó a la Casa Rosada de «desplegar» un «ataque sistemático y permanente» a la Constitución y celebró que «los ciudadanos han ganado las calles».

Así, Macri volvió a marcar presencia, en momentos en que muchas de las miradas de dirigentes de JxC comenzaban a visualizar a Rodríguez Larreta como el posible futuro líder del espacio.

La centralidad política de formar parte del tridente, junto al presidente Alberto Fernández y el gobernador bonaerense Axel Kicillof, que comanda la cuarentena por el coronavirus, le dio al mandatario porteño una proyección nacional que se recorta aún más a partir de la pelea con la Nación por el redireccionamiento a la provincia de Buenos Aires de una parte de los fondos adicionales que recibía la Ciudad, a partir de un decreto firmado por Mauricio Macri, en el 2016.

De hecho, Rodríguez Larreta, quien ya admitió sus aspiraciones presidenciales, fue el protagonista de la reunión virtual semanal de hoy de la Mesa Nacional de JxC, en la que recibió el aval de todos los presentes en su reclamo ante la decisión de la Casa Rosada y agradeció todas las muestras de apoyo.

Finalizado el encuentro, que duró hora y media y tuvo asistencia perfecta, la coalición dio a conocer un texto en el que manifestó «preocupación por la creciente tensión política y social (…) agravada por los hechos sucedidos en la última semana» y sostuvo que el país «reclama sensatez política y cordura institucional».

Ésta vez la reunión encontró a Rodríguez Larreta trasladándose en su auto y desde ese lugar escuchó a Macri decirle que había dejado «bien parado» a JXC con su planteo de llevar el tema ante la Corte Suprema, una frase que se interpretó como un aliento del expresidente al «endurecimiento» del mandatario porteño frente a la Casa Rosada.

Rodríguez Larreta confirmó que en un par de días estará lista la presentación judicial contra el decreto presidencial que dispone el traspaso de los fondos a la provincia y agradeció especialmente a los gobernadores radicales Gustavo Valdés, Gerardo Morales y Rodolfo Suárez por no firmar la solicitada en la que los demás mandatarios apoyaron la decisión del Gobierno.

El otro tema debatido fue la situación policial en la provincia de Buenos Aires, tramo en el que tomaron la palabra la exgobernadora María Eugenia Vidal y quien fuera su ministro de Seguridad, Cristian Ritondo.
«La grave crisis policial en la provincia de Buenos Aires es el resultado de la imprevisión y desatención por parte del actual Gobierno provincial y no puede pretender ser resuelta echando culpas infundadas a la gestión anterior sin asumir las propias», dice el documento.

El párrafo pareció una respuesta al gobernador Axel Kicillof, quien, al anunciar la semana pasada aumento en el salario de unos 39.000 oficiales de la Policía bonaerense, volvió a apuntar contra la gestión de Vidal.

Los participantes

 

El zoom de Juntos por el Cambio

Junto a Macri, Vidal, Rodríguez Larreta y Ritondo, estuvieron por el PRO la presidenta del partido, Patricia Bullrich, y el jefe de su bloque en el Senado Humberto Schiavoni.

Por la UCR dieron el presente el jefe del partido, Alfredo Cornejo, sus jefes parlamentarios Mario Negri y Luis Naidenoff, junto a Martín Lousteau. Se sumó el auditor Miguel Picheto y los referentes de la Coalición Cívica Maximiliano Ferraro, Maricel Etchecoin y Juan Manuel López.

Con todo, las diferencias por el perfil de la alianza opositora persisten entre el ala dura, referenciada en Macri, Bullrich, Elisa Carrió y Miguel Ángel Pichetto, la «pata peronista» de JxC; y la postura «más moderada», que, hasta ahora, encarnan Larreta, Vidal, el expresidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó; el extitular del bloque en esa cámara, Nicolás Massot y el exministro del Interior del macrismo, Rogelio Frigerio, entre otros.

Por su parte, Monzó se muestra convencido de la necesidad de inaugurar una nueva etapa «más moderada» en JxC y con ese objetivo abre el diálogo a nuevas figuras y construye políticamente desde la provincia de Buenos Aires, con la mira puesta en las elecciones de 2021 o 2023.
Lejos de las diferencias que mantuvo con la exgobernadora bonaerense, los interlocutores de Monzó hoy son justamente los «moderados» de la coalición opositora: Vidal, Larreta y el senador radical Martín Lousteau.

De lleno metido en su regreso, en las últimas horas volvió a hacer declaraciones como una señal de su decisión: aceptó que le gustaría ser gobernador de la Provincia, sostuvo que «Cambiemos no estaba preparado para gobernar» en 2015 y consideró que Cristina Kirchner y Macri «tienen que ser una etapa terminada» para lograr un «recambio generacional definitivo». (Fuente: Télam)