La empresa Ricoh ya prueba en Argentina la semana laboral de cuatro días

En Europa y otras partes del mundo se viene discutiendo desde hace algún tiempo el régimen laboral de cuatro días y hay pruebas piloto en muchas empresas, con resultados dispares. Ese concepto ya llegó a Argentina de la mano de la empresa japonesa Ricoh, y regirá para sus sucursales y dependencias de América Latina, donde el test se llevará a cabo durante los meses de julio y agosto. El objetivo de la firma es promover el “bienestar de sus colaboradores como factor principal para ayudar a crear una mejor sociedad”.

La vicepresidenta de Recursos Humanos de Ricoh Latinoamérica, Lorna Hernández, sostuvo que “este enfoque centrado en las personas impulsa la evolución de varios aspectos de la empresa: espacios digitales y físicos, procesos y cultura, para lograrlo es fundamental una estrecha colaboración entre todos los departamentos del negocio”.

La punta de lanza del régimen de 4 días la marcó Islandia cuando el Gobierno decidió realizar un ensayo a gran escala con regímenes de 35 horas semanales sin bajar los salarios. Los informes oficiales concluyeron que las personas son más felices, saludables y productivas que con grandes cargas horarias de trabajo.

En este marco, el presidente y CEO de Ricoh Latinoamérica, Diego Imperio, analizó que “la transformación al interior de las empresas ya no es una opción para el crecimiento sustentable y el desarrollo de una mejor sociedad. En Ricoh Latinoamérica estamos comprometidos en acelerar estos procesos y habilitar acciones para que las personas de la empresa cuenten con las herramientas para convertirse en verdaderos agentes de cambio en sus familias y comunidades”.

El 1º de julio

La prueba piloto en sí comenzó el 1º de julio y se extenderá por dos meses. Uno de los grandes objetivos de Ricoh apunta a mantener el nivel de atención al cliente. El día libre se rotará a la persona y según corresponda unos irán el lunes y otros el viernes.

La firma evaluará y medirá indicadores relacionados con la productividad, el equilibrio, la salud y el impacto en la organización, entre otros, para evaluar la viabilidad de la permanencia del proyecto en Argentina.

La empresa reveló que en el caso de Argentina, incluso si el cambio a una semana laboral de cuatro días pareciera estar lejos de nuestro alcance, la mayoría de los empleados “están dispuestos a comprometerse más en el trabajo y aumentar su productividad a través de la formación y la tecnología”. (DIB)