La poda debe realizarse asegurando la integridad y sanidad del árbol intervenido

Recordó el Municipio, que los árboles y los ciudadanos deben convivir en el espacio público y la calidad de vida de ambos depende de esa relación. Más personas más árboles. Las ventajas incontables que esto retribuye a la comunidad están más allá de discusión claramente.
El mismo no genera un riesgo mayor al que genera cualquier tipo de construcción que nos rodean, diseñada para resistir una exigencia y luego de la cual puede colapsar. Más aún, por ser un ser vivo el árbol se regenera y fortalece solo.
La poda de los árboles es una práctica basada en el conocimiento biológico del árbol y se lleva a cabo dándole forma para que el mismo pueda desarrollarse y crecer; permitiendo la circulación de los vehículos, el alumbrado público, la circulación de peatones, etc. Dicho esto, la mayor prioridad se da al árbol que para implantarse y alcanzar el porte final le lleva muchísimos años de cuidados del vecino y la municipalidad.
Por esto es importante tener en cuenta que la poda no es una necesidad fisiológica del árbol.
El árbol en el medio urbano requiere de podas para formar una estructura resistente y adecuada para cumplir una importante función y minimizar en la medida de lo posible los conflictos con la infraestructura y el funcionamiento urbano.
Las ventajas de la poda bien ejecutada traen muchos beneficios al árbol y al trabajador, tales como, control de temperatura, sombra, repara de vientos, las ramas bajas el riesgo a transeúntes, mejorar su apariencia, mejorar la estructura y arquitectura de la copa, incrementar el valor del árbol entre otras.
Por lo tanto, es importante conocer sobre la poda de arbolado público urbano ya que el trabajo debe tener un objetivo y éste una recompensa.
La finalidad de la poda es la puesta en valor del mismo ya que es un bien público. Estos objetivos se pueden alcanzar sabiendo que además de la autorización expedida por el municipio hay que conocer cómo, cuándo y por qué podar.
Es por ello que la Municipalidad realiza capacitaciones para quienes desean intervenir sobre el arbolado público como podadores autorizados, tales así que el martes pasado se llevó adelante la primera charla en el Centro Cultural Municipal Vieja Estación.
El arbolado público está regulado por la Ley Provincial 12276/99, Decreto 2386/03 y las Ordenanzas Municipales 3777/08, Decreto reglamentario 663/08 y la 1741/86 con su Decreto Reglamentario 1036/86, éstas normas determinan entre otras cosas, que el arbolado público es patrimonio municipal y que el cuidado es responsabilidad de cada vecino frentista y de la municipalidad a través del Registro Municipal de Podadores Autorizados (RMPA) siendo éstos los únicos autorizados a intervenir sobre el arbolado público.