La provincia de Buenos Aires se diferencia de la Ciudad y afirma que la curva de contagios de coronavirus “está igual que hace 15 días”

El avance de la pandemia

Lo aseguró el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán. Su colega porteño, Fernán Quirós, había afirmado antes un aumento sustancial de positivos en los últimos días

La provincia de Buenos Aires es, junto a la Ciudad, uno de los puntos del país con mayor cantidad de casos positivos de coronavirus, que en todo el país alcanzan los 1381 contagiados, según el último informe del Ministerio de Salud.

Sin embargo, y a diferencia de lo que aseguran en la Ciudad, el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán, aseguró este martes que en la provincia la curva está «aplanada», y si bien alertó que «puede modificarse», subrayó que «está igual que en los últimos 15 días».

«No tenemos una cantidad de contagios alta en la Provincia», aseguró el funcionario a pesar de ser la provincia con mayor cantidad de casos.

Más temprano, el titular de la cartera de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, había ratificado que las autoridades porteñas detectaron un importante incremento en la cantidad de positivos del Covid-19 en los últimos días, situación que motivó el rechazo a la habilitación de salidas recreativas, autorizadas por decreto por el presidente Alberto Fernández.

Gollán explicó de qué forma están trabajando junto al gobernador, Axel Kicillof: “Tenemos un mapa de riesgo que coincide con el que marcó nación y se trata de representar lo más fiel posible para saber la circulación del virus en cada municipio, vemos también la capacidad de respuesta de cada municipio en caso de un pico de contagios”.

Respecto de ese momento, en comunicación con radio Futurock, especificó: “Es esperable que entre mayo y junio tengamos un pico de contagios en la provincia de Buenos Aires”.

El sábado tras la comunicación del presidente Alberto Fernández donde informó la extensión de la cuarentena hasta el 10 de mayo y aclaró que en algunas provincias habría una flexibilización con salidas recreativas de los ciudadanos, Gollán analizó: «Uno abre un poquito el grifo, si aumentan los casos en algún lugar ese grifo se puede cerrar de nuevo localmente».

“En estos dos meses se estuvieron haciendo diagnósticos de riesgo para saber donde se puede abrir más o menos el grifo”, consignó el ministro de salud bonaerense.

En esa línea, defendió el accionar del gobierno de la Nación: “No es que la clave del éxito es que el virus no entre, eso es pensamiento mágico, lo que hacemos es que sea lo más lento posible y cuidando a los grupos de riesgo”.

Gollán también contó que “de todos los contagios, un 20% son del personal de la salud, pero hay que quitar los casos de gente que vino enferma del extranjero, y quita los contactos horizontales que no es que se contagian de los pacientes por falta de protección, sino que se enferman entre pares”.

En ese sentido, aseguró que están trabajando sobre ése área para «mejorar conductas».

“Además de proporcionar el equipo de protección, verificar que ese equipo se lo saquen adecuadamente y que después no se junten en la sala de médicos, la distancia social tiene que mantenerse en todo momento”, relató.

Por último, volvió sobre la polémica por la posible llegada de médicos cubanos para reforzar el sistema sanitario bonaerense: «A los que se enojan por querer traer médicos extranjeros, si son alemanes, norteamericanos o lo que sea quizás no habría tanto lio y quizás los irían a recibir con aplausos. Los que quieran ayudar en la Argentina, con las puertas abiertas. No tenemos la cantidad de médicos que hacen falta para cuando llegue el pico de contagios”.

Gollán explicó sobre esta cuestión que tienen planes de contingencia donde para que se inscriban «médicos residentes capacitándolos para que puedan manejar terapia, listas de voluntarios y médicos venezolanos que no tenían terminado sus trámites», y que desde la provincia lo están acelerando, aseguró el funcionario

“Lo que nos pasa es que los que nos dicen que van a traer médicos, no los traen. Tenemos un déficit de 500 médicos en la provincia de Buenos Aires para el momento en que venga el pico de contagios”, explicó con preocupación.

“Yo quiero tener la seguridad de que cuando una persona esté internada con un cuadro leve pero aislado, haya un médico al lado cuidándolo. Eso es lo que a mí me preocupa”, cerró Gollán. (Clarín)