La vacuna de AstraZeneca renueva respaldos de la OMS y de Boris Johnson

Mientras crece la lista de países que pausó su uso, la máxima autoridad sanitaria internacional sigue hablando de los beneficios de la inmunización.

Mientras la lista de países que decidieron suspender su uso se incrementa, la vacuna contra el coronavirus del laboratorio AstraZeneca renueva los respaldos decisivos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y del primer ministro británico, Boris Johnson, quien aseguró que él mismo se vacunará con ese fármaco desarrollado en la Universidad de Oxford.

Los beneficios que aporta “superan a los riesgos”, aseguró la OMS, y destacó que es habitual que en las campañas de vacunación los países señalen posibles eventos adversos después de la vacunación, lo que “no necesariamente significa” que los eventos estén relacionados con la vacunación en sí, aunque “es una buena práctica investigarlos”.

En ese sentido, el organismo de salud de la ONU aseguró que mantiene un contacto regular con la Agencia Europea de Medicamentos y los reguladores de todo el mundo para obtener la información más reciente sobre la seguridad de esta vacuna.

Asimismo, el primer ministro británico respaldó el uso del fármaco de AstraZeneca al asegurar que él se aplicará esa vacuna, tal como hizo ayer su par de Tailandia al aplicárselo para generar confianza después de que el país hubiera suspendido su uso.

“Lo mejor que puede decir sobre la vacuna de Oxford y AstraZeneca es que me vacunaré muy pronto (y) lo haré con esta vacuna”, aseguró.

Sin embargo, sus declaraciones generaron algunas críticas, dado que los británicos no pueden elegir qué vacuna recibir ni existe preferencia de unas dosis sobre otras para “grupos poblacionales específicos”, según las autoridades de Salud británicas.

Poco antes, el ministro de Salud británico, Matt Hancock, junto a Jeremy Brown, miembro de la junta de asesores sobre la vacuna en el Reino Unido, hicieron hincapié en su defensa de la vacuna durante una rueda de prensa en la que también estaba presente el ministro de Economía y Energía, Kwasi Kwarteng.

“No existen pruebas de que estas vacunas provoquen trombosis”, expresó Hanckock en declaraciones al diario The Sun, y aclaró que los coágulos “pueden producirse de forma natural y son comunes”. (DIB) MCH