Balance de fin de año en territorio bonaerense
En tres años de gestión al frente de la provincia de Buenos Aires, la gobernadora María Eugenia Vidal es la dirigente política con mejor imagen en todo el país. Según una de las últimas encuestas correspondiente a un sondeo de la consultora Synopsis, la mandataria le saca un amplio margen al resto de los candidatos del oficialismo, cosechando un 45,6% de valoraciones positivas.
Sin embargo, los números de las cuentas bonaerenses no caminan a la par, sino que dan cuenta y son un espejo de la crisis actual a nivel nacional. Despidos masivos, cierres, imposibilidades crediticias, caída en la actividad económica industrial y ventas, derrumbe del entramado productivo, ingreso irrestricto de productos importados; aumento de la pobreza y la indigencia; caída del poder adquisitivo; incremento de concursos y quiebras; corte de la cadena de pagos; desmantelamiento de la investigación y la transferencia de tecnología; más desempleo y precarización laboral; pérdida de derechos para grandes segmentos de la población, todos síntomas y consecuencias de la parálisis de la economía.
Además, hay que tener en cuenta que el presupuesto del año pasado quedó muy distorsionado con la presión inflacionaria que, estiman podría llegar al 50 por ciento en este 2018. En el presupuesto nacional para el próximo período se espera un incremento sostenido de precios de 23%, pero para el cálculo de la ley provincial se utilizó una inflación del 34,8%.
La inflación de septiembre, para el INDEC, fue de 6,6% en el Gran Buenos Aires, acumulando un 32,4% en lo que va del año, lo que equivale a un 40,3% respecto al mismo mes de 2017.
Pobreza y acceso
a servicios básicos
Todos los indicadores de pobreza, lejos de permanecer estancos o de mostrar mejoría, empeoraron. Según los datos correspondientes a la medición de la pobreza multidimensional del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina más del 50% de los niños y niñas del conurbano vive en condiciones de pobreza, el 10% se encuentra en indigencia y el 63,7% no tiene agua potable o cloacas. Muy por encima de los datos del año pasado en que la misma institución registró un 51,8% de población sin acceso a red cloacal y un 24,4% sin agua corriente.
Los datos se basan en un trabajo realizado a lo largo de 30 partidos del Conurbano en 1332 hogares de Vicente López, San Isidro, San Fernando, Tigre, General San Martín, San Miguel, Malvinas Argentinas, José C. Paz y Pilar, La Matanza, Merlo, Moreno, Morón, Hurlingham, Ituzaingó, Tres de Febrero, Cañuelas, General Rodríguez, Marcos Paz, Avellaneda, Quilmes, Berazategui, Florencio Varela, Lanús, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Esteban Echeverría, Ezeiza, Presidente Perón y San Vicente.
¿Qué dijo Vidal? “La pobreza no es algo que me sorprende. Es doloroso. Cada cifra duele», sostuvo hace pocos días. Sin embargo, pateó la pelota al asegurar que los altos índices de pobreza se deben al fracaso de todos los partidos políticos, y no de Cambiemos en particular. “Si hay pobreza es un fracaso de toda la política. Tenemos que hacer que esta crisis sea la última”, dijo Vidal en diálogo radio Continental.
Endeudamiento
Este ítem es, quizá, el más controvertido de la gestión Vidal. Y no sólo porque la Provincia, al igual que la Nación, tomó deuda por 28 mil millones de pesos con ANSES sumergida en el programa financiero aprobado por la Legislatura para este año; sino por el abultado adeudo previsto para el año próximo y el incremento abultado. Además, por supuesto, crece la preocupación ante la asignación 16 veces mayor a pagos de intereses que a programas industriales.
Es que, sólo el pago de intereses de deuda provincial para el año que viene representa un aumento del 99,9% del previsto para el 2018. El primer término, es un total de 56.403 millones de pesos lo que, según un estudio de la Universidad de Avellaneda también equivale a 7 veces el presupuesto para vivienda y urbanismo, y 1,8 veces a promoción y asistencia social; el segundo, 28.204 millones de pesos.
El endeudamiento, además, se consolidó como una de las principales preocupaciones de la oposición, porque buena parte de los compromisos contraídos por la Provincia están en moneda extranjera. El presupuesto contempla que el dólar mantenga una cotización promedio de 42 pesos a lo largo de todo el año y un abultado adeudo de 10.100 millones de dólares, es decir, 424.200 pesos.
Caída de la producción, (des)empleo y consumo
Según los últimos guarismos, la industria manufacturera cayó en junio un 6,4% en relación a igual mes del año pasado mientras las ventas en los supermercados lo hicieron, para el mes de julio, un 4,5% en el Gran Buenos Aires (GBA) y un 4,6%, en resto de la provincia.
Por su parte, los últimos datos publicados sobre asalariados registrados del sector privado hablan de una caída del 0,5% en julio para el total provincial y de un descenso del 0,4% en agosto para el GBA respecto de igual mes de 2017. Y estiman estudios privados que continuará esta tendencia negativa.
Cabe destacar que los datos expuestos no tuvieron en cuenta los despidos masivos registrados en los últimos meses en territorio bonaerense. Por ejemplo, el sector textil es uno de los más golpeados por la crisis. La fábrica Paquetá, ubicada en Chivilcoy, oficializó a principios de este mes el despido de 650 trabajadores, lo que se cristalizó con su cierre definitivo. En Luján, la dinámica textil es similar: tras la oficialización de que la planta de ropa deportiva SportTech replegará su fabricación en el partido de San Martin, fueron despedidos 62 trabajadores. Avellaneda también es parte del elenco con 30 trabajadores de la histórica fábrica de medias Apogeo en la calle producto del cierre de la compañía, además de los 350 despidos de la fábrica Gaelle.
Gasto y recaudación
En el mes de septiembre se registró una caída del 2,6% en relación a igual período de 2017. El gasto público, por su parte, se mantuvo estanco en 0,7%, a pesar de las transferencias del gobierno nacional y su incremento en 28% en términos reales.
La administración estimó, para el 2019, erogaciones por 929.466 millones de pesos y recursos por 889.305 millones de pesos. En consecuencia el déficit financiero calculado para el año 2019 alcanza los 40.161 millones de pesos. El resultado financiero negativo aumenta un 59,3% respecto del cierre previsto para el corriente año en 25.204 millones.
En los Ingresos Tributarios de origen provincial, la gobernación, por haber adherido al Pacto Fiscal sigue priorizando incrementar la presión impositiva sobre los inmuebles predominantemente urbanos y reducir progresivamente la incidencia de los tributos sobre la actividad económica. De este modo se advierte que en tanto el impuesto inmobiliario experimentará una suba interanual 2019/2018 del 37,8%, el impuesto a los Ingresos Brutos, principal fuente de recursos de la provincia subirá un 31,7% interanual.
Por otra parte, este año fue testigo del debate sobre impuesto al juego. Es que, finalmente, se comenzará a aplicar un impuesto del 2% para los premios de máquinas tragamonedas y se controlará el juego online. Se proyecta recaudar por esta vía unos 6 mil millones. Además, el Gobierno prevé bajar algunas alícuotas de Ingresos Brutos para fomentar la producción y el comercio. Se calcula un “sacrificio fiscal” de 10 millones de pesos que se compensarán parcialmente con un incremento de 38 por ciento de tributos patrimoniales, como el Inmobiliario Urbano y el Rural.
A modo de conclusión, la evolución del endeudamiento provincial en los últimos años, y fundamentalmente en el 2018, indica el deterioro financiero de la provincia bajo la gestión de Cambiemos. Y lo que viene no es muy alentador, ya que el pago de deuda es el único ítem que crecerá por encima de una inflación que cálculos optimistas sitúan para todo 2018 en 45 por ciento y otros, más agoreros, no dudan en ubicar más cerca del 50 por ciento.
La Gobernadora también hizo su racconto de 2018 y declaró en radio Continental hace una semana: “Fue un año muy complicado” pero remarcó que existe una “diferencia enorme con otros años complicados”, y aseguró: “No ignoramos los problemas y venimos acompañando. Es un camino muy difícil pero necesario, no es lineal, hay avances y retrocesos. Lo que duele no son los números, sino la realidad”.
(Fuente: Infocielo)
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