Macri: «Argentina no tiene que tenerle miedo a las reformas»

Tras el triunfo a nivel nacional conseguido ayer en las elecciones legislativas, el Presidente dijo que el iniciado «es un camino largo en el que nadie nos va a regalar nada». Habló de la necesidad de modificar el sistema electoral, confirmó que convocarán a los gobernadores y dijo que es necesario reducir el gasto público «porque los argentinos no pueden pagar más impuestos»

El presidente Mauricio Macri advirtió ayer que su Gobierno seguirá tomando deuda pública para financiar el déficit fiscal de la economía y poder reducir la inflación, durante una conferencia de prensa brindada en la Casa Rosada tras el triunfo electoral de Cambiemos en las elecciones legislativas y dijo que «no hay que tenerle miedo a las reformas».
Además, en referencia a una posible reforma laboral, reiteró que dialogará sector por sector pero resaltó que Argentina ingresó «en una etapa de reformismo permanente» y que «no tiene que tenerle miedo a las reformas».
«Mientras la Argentina tenga déficit fiscal, va a seguir teniendo que tomar deuda. Tenemos un compromiso central que es reducir la pobreza. Y el primer camino es bajar la inflación. Si uno no va a financiar el déficit con inflación, lo tiene que financiar con deuda», subrayó.
Consultado sobre el fuerte incremento aplicado ayer al precio de los combustibles, en torno al 10%, Macri aseguró ayer que «nunca» engañó al electorado y que desde un principio advirtió que «este es un camino largo».
«Todo este proceso» la gente «lo entendió, lo sé. Los escucho, los visito, nunca los engañé, este es un camino largo, pero nos lleva a una sociedad más justa», en la que cada uno pueda «ser protagonista, crecer, proyectarse», remarcó el mandatario, y dijo que a partir de ahora los precios de las naftas dependerá de la variación internacional y «ahora justo aumentó».
«Cuando llegamos, el mundo era más barato que la Argentina. Cuando quisimos desregular, ir al precio internacional, vimos que si lo hacíamos, mucha gente en las provincias de sur se quedaban sin trabajo. Hicimos un acuerdo para hacer un precio sostén y en un par de años, darles un sendero de precios», explicó. «En la Argentina vamos a pagar lo que vale en el mundo, lo que pasa es que justo ahora aumentó, pero soy optimista, porque el combustible va a volver a bajar, el petróleo va a volver a bajar. Hoy, como el precio internacional está más alto, tenemos este aumento, pero a partir de ahora, va a seguir lo que pasa en el mundo, si en el mundo baja, los precios van a bajar, si los precios suben, van a subir».
En otro orden, Macri ratificó ayer su decisión de avanzar en los cambios económicos y sociales para el país con «la mayor velocidad que podamos y con todo el gradualismo que podamos», en tanto el jefe de Gabinete, Marcos Peña, reiteró que en 2018 se producirá la «mayor inversión social» de la historia de Argentina.
Durante el contacto que mantuvo ayer con la prensa, el jefe de Estado convocó a los gobernadores a que «sean jugadores importantísimos» porque hay que realizar «decenas de reformas», y en esa mesa también incluyó a los intendentes y gremios.
«Lo antes que podamos», remarcó el jefe de Estado cuando le consultaron cuándo realizará la reunión con los gobernadores, luego de que ayer el oficialismo ganó las elecciones legislativas en la mayoría del país.
Macri enfatizó su idea de llevar a cabo «decenas de reformas para generar trabajo y oportunidades para todos», por lo cual señaló «que los gobernadores sean jugadores importantísimos aunque sean de distintos partidos políticos y que se sumen los intendentes importantes y los gremios».
Por otra parte, indicó que el poder «no» lo «va a cambiar» porque él es «siempre el mismo», al tiempo que expresó que cuanto más votos reciba la fuerza que lidera más se va a «preocupar de reflexionar» y ver si está «haciendo todo lo posible por ayudar» a la sociedad.
«Yo tengo claro que el poder es una responsabilidad, que el poder es algo maravilloso si uno lo logra emplear en que mucha gente tenga paz, tenga futuro», enfatizó el presidente, quien remató: «a mí el poder no me va a cambiar, yo soy siempre el mismo». Y remarcó que «lo importante es que yo antes de dormir siga haciendo una autocrítica, antes de que esa almohada te deja dormir todas las noches, preguntarse qué faltó, qué más pude hacer».
Además evitó ayer contestar si el triunfo del oficialismo en las elecciones legislativas «potencia» la posibilidad de aspirar a un segundo mandato, y, en cambio, remarcó que para pensar en eso «todavía hay tiempo».

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