Pese al optimismo del Gobierno con la evolución y la trayectoria en el tiempo de la inflación, los números oficiales encendieron una luz de alerta. La inflación núcleo, que descarta precios estacionales y regulados, fue en febrero de 2,1%, la marca más alta en los últimos 10 meses.
Los aumentos de la luz, los colectivos y los trenes -los precios regulados en general- impulsaron la inflación de febrero, que cerró en un 2,4% a nivel nacional, según el IPC difundido hoy por el Indec . Se trata de una cifra en línea con lo que esperaban los analistas privados, que para fin de año, proyectan una suba de precios en torno al 20%, o sea, de varios puntos por encima de la meta del 15% fijada por el Gobierno.
Sin embargo, ese 2,4% tuvo ayudas. Una fue la caída de los precios estacionales (-0,7%) en el mes. Otra, que el Indec matizó la suba del transporte con los descuentos del sistema multimodal en el área metropolitana, y sacó un precio promedio. Las principales subas del mes se registraron en los capítulos Vivienda, Agua, Electricidad, Gas y otros Combustibles (3,8%), Transporte (4,5%), Salud (2,3%) y Comunicación (9,1%).
Los expertos privados ya habían anunciado con mucha anticipación el impacto de la suba de transportes (+33%), electricidad (+30%), y prepagas (+4%). A esto sumaban el golpe que proporcionaría en el bolsillo el aumento en los precios de los combustibles en los surtidores por la devaluación y el alza del crudo internacional.
«Los datos en línea con lo estimado, quizás los del Gran Buenos Aires son un poco más elevados», afirmó a LA NACION el director de Ecolatina, Lorenzo Sigaut Gravina. «Hay que destacar la inflación core de 2,1%, la más elevada desde abril de 2017», agregó.
«El primer bimestre arrancó mal. Marcó un 4,2% contra el 3,7% primer bimestre del año pasado. La variación interanual, en tanto, pasó de 24,8% en diciembre a 25,4% en febrero», señaló Sigaut Gravina. «Si se toman los últimos tres meses, diciembre, enero y febrero, la inflación acumula un 7,5%. La núcleo, un 5,4%. Son valores muy elevados», cerró. .
«La inflación núcleo registró una aceleración de 0,6 puntos porcentuales en el último mes: pasó de 1,5% enero a 2,1% en febrero, el dato más alto de los últimos diez meses», coincidió Melisa Sala de Labour, Capital & Growth (LCG) en diálogo con este medio. «Hubo aumentos de segundo orden, por el fuerte ajuste de las tarifas en diciembre último y cierto traslado a precios de un deslizamiento más acelerado del tipo de cambio que podrían explicar el impulso de la inflación núcleo», agregó la especialista.
«A partir de los aumentos previstos para regulados estimamos que la primera mitad del año cerrará con una inflación acumulada de 11%. Cumplir con la meta de inflación del BCRA demandará una desaceleración de la inflación a tasa del 0,6% mensual desde el segundo semestre; algo que vemos muy poco probable aun sin considerar que restan nuevas recomposiciones de tarifas», concluyó.
«Los alimentos y bebidas volvieron a crecer más de 2% al igual que restaurantes y hoteles. Esto, sumado a la aceleración en equipamiento, podría sugerir traslado de la suba del tipo de cambio a precios. Esto también puede verificarse en la suba de la inflación núcleo, que pasó de 1,5% en enero a 2,1% en febrero», señaló el economista Camilo Tiscornia. «En la medida en que el tipo de cambio empiece a estabilizarse y pasados los ajustes de precios regulados, la inflación bajará en la medida en que el BCRA no relaje prematuramente su política monetaria. Estimamos que la inflación del año aún puede quedar debajo del 20% pero difícilmente se cumpla la meta del 15%», explicó.
Este mediodía se conoció además el dato de la inflación en la Ciudad de Buenos Aires. El número fue del 2,6% el mes pasado, según la Dirección General de Estadística y Censos porteña, que precisó que la suba de precios acumulada en los últimos 12 meses asciende al 26,3%. Según el informe oficial, la inflación núcleo (excluye los precios regulados y estacionales) fue del 2,1%.
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