Síndrome de Kawasaki y coronavirus en niños: incidencia y alcances

Si bien varios países habían alertado sobre la relación de estas dos afecciones y la OMS había apoyado esa posibilidad, a nivel local no se han detectado casos excepcionales.

Varios estudios se han realizado desde el inicio de la pandemia en Gran Bretaña, Estados Unidos e Italia vinculando la aparición del llamado Síndrome de Kawasaki en niños a la infección por SARS-CoV-2, el nuevo coronavirus. Incluso, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que había una posible relación entre ambos.

Uno de los primeros artículos se publicó en mayo en la revista especializada The Lancet, en el que médicos del Servicio de Recuperación del Sur del Támesis en Londres alertaron que “durante un período de 10 días, a mediados de abril de 2020, observamos un grupo sin precedentes de ocho niños con shock híper inflamatorio, con características similares a la enfermedad de Kawasaki”.

El 5 de mayo, también se reportó que al menos quince niños estaban hospitalizados en Nueva York con un cuadro como el descrito en el artículo de The Lancet.

Hacia mediados de mayo, en pleno primer pico de la pandemia en Europa, Francia informó que comprobó 144 casos de menores que presentaban un síndrome similar a la enfermedad de Kawasaki.

Lo cierto es que si bien no hay nada probado, la propia OMS dejó entrever que podría haber una conexión entre las dos afecciones. Pero, ¿qué es el Síndrome de Kawasaki? ¿Ha tenido incidencia en Argentina en estos siete meses de pandemia?

Gisela D’Angelo es médica infectóloga pediatra de la Unidad de Trasplantes de Médula Ósea del Hospital de Niños “Sor María Ludovica” de La Plata. En diálogo con DIB explicó que “el Síndrome de Kawasaki es una vasculitis de origen desconocido, ya que si bien se presume que la causa puede llegar a ser viral no está del todo definido”.

Esta afección “se manifiesta en la piel y mucosas y la arteria coronaria a nivel cardiaco, generando distintos criterios, sobre todo si persiste la fiebre por más de cinco días, eso sería un criterio mayor asociado o no a manifestaciones cutáneas, en mucosas, en ojos, lo que llamamos inyección conjuntival, con alteraciones en estado de ánimo que en realidad son neurológicas y transitorias, como la irritabilidad”.

Sobre la relación de esta afección con casos de infección previa con SARS-CoV-2, D’Angelo señaló que al menos en el Hospital de Niños de La Plata, que opera a nivel provincial, “hemos tenido un solo caso que creemos que puede haber gatillado en un paciente de 2 años, a quien se le tuvo que pasar gamaglobulina y respondió, por lo que se consideró que al responder era Síndrome de Kawasaki”.

La especialista indicó que “no hemos tenido más casos asociados en niños a esta patología, es muy poco lo que hemos visto en la ciudad de estos casos asociados, hubo alguno detectado en el interior de la provincia de Buenos Aires pero no mucho más”.

D’Angelo explicó además que “el tratamiento en enfermedad de Kawasaki es con aspirina, a una dosis anti agregante plaquetaria, para evitar la afectación coronaria, y por otro lado la inmunoglobulina, para aportarle al paciente inmunidad y de esa manera resolver el cuadro”. (DIB) AR