Para la ministra de Seguridad de la Nación, la actitud de la Policía porteña fue «repudiable» y dijo que habló «en dos oportunidades con Santilli para pedirle que frenara esto».
La ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic, dijo que «es falso que la Policía Federal le hubiera dado la orden de reprimir a la Policía de la Ciudad», consideró que el accionar de esa fuerza fue «repudiable», y evaluó como «positivo» el balance de la jornada del velorio de Diego Maradona que se realizó ayer en la Casa de Gobierno.
«Yo no puedo darle órdenes» al vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, dijo hoy Frederic y agregó: «Él controla su policía; por eso, es falso que la Policía Federal le hubiera dado la orden a ellos» de reprimir durante los incidentes que se produjeron ayer en la intersección de la avenida de Mayo y 9 de Julio, con los manifestantes que hacían la fila para ingresar al velorio.
«No hay forma de hacerlo; en todo caso, se coordinan acciones, pero la decisión es de ellos», puntualizó la funcionaria en un reportaje brindado esta mañana a la radio online FutuRöck.
Para la ministra, la actitud de la Policía porteña fue «repudiable» y dijo que habló «en dos oportunidades con Santilli para pedirle que frenara esto».
«La Policía de la Ciudad tiene una mecánica de trabajo: esta modalidad de personas sin uniformes que luego se colocan la chaqueta y comienzan a cazar gente»
«La Policía de la Ciudad tiene una mecánica de trabajo: esta modalidad de personas sin uniformes que luego se colocan la chaqueta y comienzan a cazar gente. Es una modalidad que nosotros no la consideramos válida, ni apta y mucho menos si esa gente se ocupa de amenazar, periodistas, personas o a cualquier ciudadano», indicó.
En ese marco, la funcionaria afirmó que «el cierre final del velorio se desarrolló con normalidad» y, que si bien «hubo un momento difícil en Casa Rosada de no más de 20 minutos, y no pudimos permitir que todos los que estaban esperando pudieran despedir los restos de Maradona, el balance es positivo».
«No digo que tenemos un 10, pero hemos permitido que la mayoría de la gente tuviera una proximidad con el féretro», sintetizó Frederic.
Al hacer una cronología de los hechos que desataron la represión, la ministra explicó: «A nosotros nos llega la información de que el Gobierno de la Ciudad le avisa a la gente que estaba en Avenida de Mayo por Bernardo de Irigoyen hasta Constitución, que no va a poder visitar a Maradona porque se cerraban las puertas a las 16 o 16.30. Esto produjo los desmadres y ahí caen las vallas».
Añadió que la decisión de informar sobre esta cuestión fue «inconsulta» ya que «en ese momento nosotros estábamos diseñando un dispositivo para evitar eso, ya que sabíamos que la gente se iba a molestar».
Como consecuencia de esa situación, «la gente empezó a avanzar sobre la Plaza de Mayo» a lo que se sumó la rotura de «una hoja del portón», de la Casa Rosada, lo que precipitó que un grupo de personas ingresara al Patio de las Palmeras.
«En el momento de la represión en 9 de Julio y Avenida de Mayo, se produce la aglomeración que se extiende hasta la Casa Rosada, las vallas ya no contenían y se rompe una hoja del portón. Ahí comienza a pasar la gente hacia el interior, yo estaba ahí, y uno de los grupos van hacia el Patio de las Palmeras. Empiezan a cantar más fervorosamente, se quedan, no circulan, y a los 15 minutos ingresó personal de la Policía Federal y los retiró de a poco», relató.
La ministra puntualizó que «habrán sido 50 personas» y que «no estuvieron más de media hora».
«Nada de lo que hicimos fue usando la violencia, sino la palabra, y eso lleva más tiempo», apuntó.
Sobre los contactos que mantuvo ayer con Santilli, Frederic explicó que en la primera ocasión, «alrededor de las 14 o14,30», el vicejefe de Gobierno le respondió que «hubo desborde y estamos conteniendo».
«‘Si no lo hacemos, van a ir a la Plaza de Mayo’, me dijo», completó la ministra, quien contó que ella le respondió «dejá que vengan».
La ministra contó que, tras el segundo llamado -alrededor de las 16- «cesó» la represión y que por eso «la gente empezó a avanzar sobre Plaza de Mayo» en un momento en que el «corredor dispuesto ya no existía». (Fuente: Télam)