Según un informe de Abeceb, en el país la cantidad de horas trabajadas se redujo el doble que en el resto del mundo. Cuáles son los sectores más críticos y los más estables
La economía argentina necesitaría atravesar cinco años con un ritmo de crecimiento económico por encima del 3% anual para lograr recuperar los puestos de trabajo perdidos durante la pandemia, según una estimación realizada por la consultora Abeceb.
El estudio afirma que durante 2020 alrededor de 1,2 millones de trabajadores quedaron desocupados “con una baja tres veces más acelerada entre los informales y cuentapropistas que entre los formales”. “Las decisiones administrativas vinculadas al aislamiento y los protocolos redujeron las horas trabajadas en más del doble del ritmo que en el resto del mundo, con una baja del 20% al tercer trimestre (vs 10,2% a nivel mundial mundo, según la OIT)”, apuntó el informe.
A modo de ejemplo, citó la consultora al tercer trimestre (último dato disponible) un trabajador promedio de la construcción trabajó un 40% menos horas que un año atrás y un 20% para un trabajador de la industria o del comercio.
Abeceb afirma que durante 2020 alrededor de 1,2 millones de trabajadores quedaron desocupados
Como consecuencia de la pandemia, remarcó Abeceb, los puestos de trabajo alcanzaron mínimos en 9 de 16 sectores productivos. “Las excepciones fueron la administración pública y el sector agropecuarios que tocaron máximos. Además, el valor agregado por trabajador retrocedió al mínimo en 11 de los 16 sectores productivos”, sostuvo.
“Para retornar a igual número de ocupados que en 2019 se requerirán cinco años de crecimiento por encima del 3%, un escenario positivo teniendo en cuenta los profundos desequilibrios macroeconómicos actuales”, advierte el documento. En ese sentido, Abeceb afirmó que “para que el 43% de la población (tasa de ocupación de 2019) vuelva a trabajar, se requerirán dos años más, al incorporar al análisis el crecimiento poblacional”, explicó.
La consultora fundada por el ex ministro de Producción Dante Sica difundió un informe sobre coyuntura laboral, en el cual alerta que “el riesgo es que 2021 se convierta en un año de rebote sin empleo”. No obstante, considera que “si avanza la normalización en las horas trabajadas, la economía podría crecer entre un 3,6% y un 5,3% en el año sin generar ningún puesto de trabajo. Asumiendo un crecimiento del 5,9% en promedio se generarán menos de 500.000 nuevos puestos”.
Sostiene que el sector de la construcción “podría explicar la mitad de la creación de empleo” y que en la industria las expectativas “son ligeramente positivas, aunque aparecen alertas en textiles y confecciones, productos del metal y aparatos eléctricos”. “La recuperación podría no ser suficiente para revertir el signo en el sector extractivo, los servicios personales y comunales y hoteles y restaurantes, que concentran un quinto del empleo. Las perspectivas son estables para el comercio”, explica el informe de Abeceb.
Si avanza la normalización en las horas trabajadas, la economía podría crecer entre un 3,6% y un 5,3% en el año sin generar ningún puesto de trabajo
“Para que el 43% de la población (tasa de ocupación de 2019) vuelva a trabajar, se requerirán dos años más, al incorporar al análisis el crecimiento poblacional”, agrega. Pronostica que “las formas más flexibles de trabajo, a tiempo parcial, con contratos por tiempo determinado o tercerizados, continuarán tomando relevancia en el mundo del trabajo, sin que nuestro país cuente con un marco moderno que encauce este tipo de relaciones laborales”, agregó.
“Las nuevas formas de trabajo como el remoto, el e-commerce y la automatización de tareas implican que las brechas laborales continuarán acrecentándose a favor de los calificados frente a los no calificados y el empleo formal de calidad probablemente sea el último en reaccionar”, destacó el informe.
Por último, Abeceb identificó cuatro sectores diferenciados. Entre los mercados laborales críticos “se encuentran hoteles y restaurantes, servicios sociales, personales y comunitarios y el servicio doméstico, donde la caída en el empleo y las horas trabajadas ha sido la más fuerte”. Por el contrario, los rubros estables fueron aquellos declarados esenciales o los dependientes del sector público.
En el medio hay otro universo de rubros distintos. “En las dos categorías intermedias, distinguimos primeros a aquellos sectores que tuvieron una caída muy fuerte en la actividad económica y en el empleo pero donde el ajuste en las horas trabajadas absorbió la mayor parte de la baja, en términos relativos. Aquí encontramos a la construcción, el transporte y la logística y la explotación de minas y canteras”, aseguró el informe.
“Otros sectores mostraron un ajuste de los puestos más en línea con la caída de la actividad económica además de una caída en las horas trabajadas. En este grupo se ubica el comercio, las actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler y la industria manufacturera. En estos casos, sostener la recuperación hacia 2021 será la clave para generar más empleo”, concluyó Abeceb.
Entre los mercados laborales críticos se encuentran hoteles y restaurantes, servicios sociales, personales y comunitarios y el servicio doméstico.
De acuerdo a cifras oficiales, el desempleo aumentó en el tercer trimestre hasta 11,7% y se mantiene en los niveles más altos de los últimos quince años. Según informó en diciembre el Indec, la tasa de desocupación se incrementó dos puntos porcentuales en relación con el mismo trimestre de 2019, cuando había sido de 9,7% de la fuerza laboral.
En el marco de una normativa que prohibió los despidos sin causa a trabajadores en relación de dependencia y que estableció doble indemnización para cesantías, la válvula de escape por la cual se notó el deterioro del mercado laboral durante la pandemia fue entre los sectores más vulnerables.
En ese aspecto, de acuerdo a los último datos disponibles del Indec a nivel nacional, aún hay 2 millones de puestos de trabajo menos que en la prepandemia. Hasta junio se habían perdido unos 3,5 millones de empleos, entre trabajadores formales e informales. Y durante el tercer trimestre se recuperaron poco más de 100.000 empleos registrados y otros 1,7 millones de trabajadores de la economía informal, entre cuentapropistas, changarines y asalariados. (Fuente: Infobae)