Las vacunas de Pfizer y AstraZeneca contra el coronavirus son extremadamente seguras, con algunos efectos secundarios leves esperados, informó este viernes el regulador de medicamentos del Reino Unido (MHRA).
El MHRA aseguró en un comunicado que la gran mayoría de los efectos secundarios notificados son leves y de corta duración y reflejan una respuesta inmunitaria normal a las vacunas, como el dolor de brazo y fatiga.
Los resultados surgen de los primeros informes de seguridad evaluados por el organismo en base a casi siete millones de dosis administradas hasta el 24 de enero, principalmente con la vacuna de Pfizer, que fue con la que inició la inmunización el Reino Unido.
El comunicado indicó que se reunieron una gran cantidad de datos sobre la seguridad de ambas vacunas ya que se administraron más de diez millones de dosis en todo el país, y que se irán dando a conocer semanalmente.
El informe del MHRA precisó que se notificaron unas 22.820 reacciones sospechosas, por lo que aproximadamente tres de cada 1.000 personas vacunadas se vieron afectadas.
Explicó que casi todos los casos fueron leves, como dolor en el brazo y síntomas parecidos a los de la gripe, que reflejan una respuesta inmunitaria normal a las vacunas.
A su vez, reportó que se registraron 143 fallecimientos entre los millones de vacunados, algo que consideró que no es un dato alarmante ni preocupante, ni está relacionado de ninguna manera con la vacuna.
El regulador también recibió 75 informes de parálisis o debilidad facial, pero sostuvo que esta condición puede ocurrir de forma natural, similar a la tasa esperada y actualmente no sugiere un mayor riesgo por inmunización.
Según el análisis, la seguridad de estas vacunas siguen siendo tan alta como se esperaba a partir de los datos de los ensayos clínicos que respaldaron las aprobaciones de los organismos de control. (DIB) MCH