Tremenda mujer maravillosa, madre, amiga, compañera, dulce, humilde y podría seguir escribiendo miles de palabras para describirte, abuela sin igual, compinche y cómplice de muchas travesuras de tus nietas y nietos… abuela trompeta.
Caprichosita con tus cosas…
Dejaste este mundo porque ya no aguantabas más tus dolencias y nos dijiste que estabas cansada. Decidiste irte, y seguro que lo entendemos, pero nos duele en lo más profundo del alma.
Hoy no tenemos más que palabras de agradecimiento por todo lo que nos enseñaste y diste, según tus posibilidades; y fue mucho, te aseguro…
Nos dejaste los mejores valores, lo que somos es gracias a vos.
No queremos ser repetitivos solo Gracias Mamá!!! Descansa en paz. Te amaremos por siempre.
Besos enormes al cielo…
Gabriel, Marcelo, Analía y familias