El proyecto que obtuvo media sanción el fin de semana delega en el Ejecutivo la posibilidad elevar cuando lleguen los acuerdos salariales de este año
El proyecto de Ley modificación del Impuesto a las Ganancias que recibió media sanción el domingo a la madrugada incluyó un cambio en el texto que le da al Gobierno el poder de poner un piso aún más alto que el de $150.000 para evitar que por la inflación y los ajustes de salarios que se den este año, los empleados recientemente liberados del pago caigan otra vez en el universo de afectados por el tributo. El texto también incluye la previsión de que quienes ganan entre $150.000 y $173.000 mensuales paguen menos para evitar saltos bruscos en la escala del impuesto.
El proyecto sobre Ganancias que impulsó el oficialismo y que ya cuenta con la media sanción de la Cámara de Diputados modifica el artículo 30 para aumentar la deducción especial a partir del cual se calcula el impuesto, con el fin de que no paguen ese gravamen los trabajadores que cobren hasta $150.000 brutos. Los puntos principales sobre los que reposan los cambios son dos: un nuevo piso de ingresos de trabajadores en relación de dependencia a partir del cual se está sujeto al tributo y la reducción del impacto sobre aguinaldos.
Pero además, en el texto se fijó que la actualización del piso para estar exento de ganancias se ajustará por el RIPTE (promedio de variación salarial que elabora la de Secretaria de Seguridad Social), porque se dejó de lado el reclamo de la oposición de que se ajustara por el Índice de Precios al Consumidor (IPC, o inflación minorista) que elabora el Indec.
Según los cálculos del oficialismo- beneficiará a 1.267.000 personas
En esa línea, como un aumento salarial otorgado este año puede hacer que una persona que había quedada eximida del impuesto volviera a quedar sujeta a pagarlo, los legisladores delegaron en el Ejecutivo la capacidad de elevar el piso, en caso de que lo considere necesario.
“Facultase al Poder Ejecutivo nacional a incrementar, durante el año fiscal 2021, los montos previstos en el anteúltimo parrafo del inciso c) del articulo 30 de la Ley de Impuesto a las Ganancias, texto ordenado en 2019 y sus modificaciones”, establece en forma explícita el nuevo texto.
El ajuste, si se lleva finalmente a cabo, sólo podrá hacerse durante este año y “si se actualiza será en base a evolución de paritarias y RIPTE” aclararon fuentes de la Cámara de Diputados. El ajuste anual vía RIPTE ya estaba en el texto original.
Por otro lado, los trabajadores que cobren entre $150.000 y $173.000 mil pagarán ganancias, pero la AFIP establecerá las deducciones para evitar grandes diferencias entre los que deben tributar y los que están exentos.
El espíritu de estas previsiones, explica desde el oficialismo, es tratar de mantener el aumento en el poder adquisitivo que se busca generar con la elevación del piso para el pago de Ganancias a un sector de los trabajadores registrados.
Esta medida -según los cálculos del oficialismo- beneficiará a 1.267.000 personas, del total de dos millones de asalariados registrados que hoy pagan ese tributo.
Como un aumento salarial otorgado este año puede hacer que una persona que había quedada eximida del impuesto volviera a quedar sujeta a pagarlo, los legisladores delegaron en el Ejecutivo la capacidad de elevar el piso
En el caso de los jubilados, los ajustes al piso de Ganancias no serán necesarios por la forma en que está redactada la excepción. La ley establece que un jubilado, accede al beneficio de no pagar Ganancias si gana menos de 8 haberes mínimos ($165.000), por lo que los aumentos al mínimo mueven automáticamente el piso para el tributo.
Sin embargo, el beneficio para jubilados aplica siempre y cuando no tenga otros ingresos distintos a la de la jubilación. Por caso, si tiene intereses de un plazo fijo pierde el beneficio. Se propone flexibilizar ese punto estableciendo un monto mínimo de ingresos por debajo del cual no se pierde el beneficio.
La otra modificación importante que está en el eje del texto con media sanción surge de la reunión que mantuvo el presidente de la Cámara Baja con una veintena de dirigentes sindicales. El impulsor del proyecto, Sergio Massa, escuchó los planteos de la CGT y, tras estudiar las sugerencias incluyó un cambio sobre el Sueldo Anual Complementario. Con la sanción de la Ley se eximirá del pago del tributo a los aguinaldos con base en sueldos de hasta 150.000 pesos. (Fuente: Infobae)