El 90% de los hisopados se realizan en domicilios para evitar la circulación y cortar la propagación del coronavirus.
Un equipo del Hospital Municipal San Vicente de Paul conformado por cuatro enfermeras capacitadas, hacen cuatro veces por semana recorridos, cronometrados y organizados para tomar muestras a todos los pacientes con síntomas sospechosos.
“En esta segunda ola de Covid-19 que está atravesando en todo el mundo, también en Chascomús nos toca tener un gran aumento de casos con muchos positivos nuevos por día y muchos sospechosos, esto motiva una necesidad de hacer más hisopados diariamente”, explica la directora asociada del Hospital Municipal, Dra. Marina Vicens.
Quienes presentan síntomas compatibles con la enfermedad, deben comunicarse telefónicamente con el sistema de salud para que un médico evalúe su situación y determine si es necesario un test PCR.
Para realizar estos análisis, el año pasado se conformó en el Hospital un equipo móvil con una ambulancia para hisopados formado por cuatro enfermeras y un chofer.
“Se armó para hisopar en domicilio para que la gente que tiene síntomas no deambule por la ciudad y no vaya al hospital adónde sólo debe llegar el paciente que deba ser internado”, cuenta la jefa de enfermera del servicio de guardia, Jésica Duré, quien integra el equipo junto a Sofía, Aldana y Andrea.
En las últimas dos semanas, llevaron a cabo cerca de 500 hisopados, a niños y adultos de toda la ciudad.
Ante el aumento de casos sospechosos y de demanda, se destinan 4 días de la semana (lunes, miércoles, jueves y sábados) para hacer hisopados. En varias oportunidades utilizaron dos ambulancias de forma simultánea para poder cubrir la demanda.
Es importante aclarar que para tomar las muestras deben esperarse entre 48 y 72 horas desde la aparición de los síntomas, por lo que se arma el cronograma previamente.
El trabajo comienza antes de las 7 am con la preparación de los insumos para tomar las muestras y luego se inicia el recorrido armado previamente con un cronograma por barrios y sectores.
Al llegar a cada domicilio, las enfermeras se visten con escafandra, mameluco, botas, doble guante y doble cofia. Luego de tomar la muestra con un hisopo, salen y otra enfermera las rocía con alcohol y se cambian la ropa por otra nueva para la siguiente muestra.
“Queremos que la gente sepa que se está trabajando de una forma organizada y dando respuestas a todos, aunque pueda haber una demora por la gran demanda pero en todos los casos que sea necesario, se va a tomar la muestra correspondiente”, aseguró la jefa de Guardia del Hospital, Karina Asiaín.