El médico infectólogo Pedro Cahn analizó este momento de la pandemia de coronavirus en el país y señaló que por las medidas llevadas adelante en las últimas dos semanas “estamos mejor, la curva de contagios ha tendido a estabilizarse, pero tenemos números muy altos”.
En tanto, sobre las restricciones, Cahn dijo que “nadie está a favor de las restricciones por la restricciones en sí mismas, lo que sucede es que la alternativa es más internaciones, más enfermedad y más muerte“.
En declaraciones a AM 750, Cahn expresó su descontento con el retraso en la entrega de vacunas e indicó que “a esta altura tendríamos que tener 20 millones y han llegado la mitad o un poco más” y añadió que “si no se aplicaron más no es porque estén guardadas en un freezer, es porque las compañías tomaron compromiso más allá de su capacidad de producción”.
En ese sentido, precisó que desde algunos medios de comunicación se trata el tema como si fuera un problema solamente de Argentina, “pero es un problema internacional”.
“La gestión de la pandemia ha tenido matices, de locura total y descontrol hasta de restricciones muy severas, pero cada uno se la fue arreglando como pudo frente a un desafío para el que nadie estaba preparado”, agregó el infectólogo.
Sobre la falta de cuidados de un sector de la población, que sigue realizando fiestas clandestinas o no cree en el virus, el asesor del Gobierno precisó que “no es exclusividad de Argentina” y puso énfasis en la necesidad de que “las personas se cuiden y usen el barbijo, tapando nariz boca y mentón”, y precisó que “hay que terminar con el remanente de gente que no usa barbijo o colgado del cuello o con la nariz al aire”.
Sobre la posibilidad de que termine la pandemia pronto o que el virus baje su circulación, Cahn expresó que gracias a las vacunas “es posible que podamos vivir muchos años conviviendo con el coronavirus, el efecto de las vacunas es proteger frente a las formas graves, es no tener 500 muertos por día, lo mismo pasa con la vacuna de la influenza”. Asimismo, acerca de la posibilidad de que amaine la situación por la aparición de algún antiviral efectivo, Cahn fue categórico: “Erradicar una enfermedad infecciosa sin vacuna es imposible, la primera fue la viruela y fue gracias a la vacuna, contar con un antiviral sería importante para trabajar en materia preventiva, ya hay muchas estrategias que están en marcha”. (DIB) ACR