Santiago Solans Portillo, el joven que viajó desde Miami con coronavirus y fue detectado en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza por las cámaras térmicas, ya que presentaba más de 38 grados de fiebre, rechazó las imputaciones y apuntó a la aerolínea y a la tarjeta de crédito a través de la cual tenía cobertura médica.
El joven se negó a declarar pero se pronunció a través de un escrito que su abogado presentó ante el juez federal de Lomas de Zamora, Federico Villena.
Solans Portillo admitió que horas antes de su regreso se había hecho un análisis con resultado positivo para Covid-19, pero que el médico que lo atendió aludió que seguramente era “un falso positivo” tras haberse vacunado.
El joven aseguró que él le había enviado a la aerolínea el primer informe médico que aseveraba que portaba coronavirus. Su versión fue confirmada por American Airlines ante el juzgado. La empresa presentó un escrito en donde admitió que hubo un error por parte del personal en Miami, que recibió el certificado positivo y le permitió subir igual al avión.
De todas maneras, en los documentos presentados en migraciones, figuraba que no presentaba la enfermedad, por lo que habría incurrido en una falta.
Santiago Solans Portillo arribó el domingo al país con coronavirus, desde Miami, y quedó detenido y alojado en un hotel por presentar un certificado donde negaba el diagnóstico. (DIB) ACR