Remarcó que la comunicación con el RDIF es constante
La asesora presidencial resaltó que la nota es de hace tres semanas. Indicó que, desde entonces, hubo envíos de 1,5 millónes del componente 2 y también llegaron insumos para elaborarlos en el país.
La asesora presidencial y una de las figuras clave en las negociaciones para compras de vacunas, Cecilia Nicolini, salió a ponerle paños fríos a la trascendencia de la “nota informal” que le envió al Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) para reclamarle el envío retrasado de segundas dosis de la vacuna Sputnik V. “Los reclamos siguen porque tenemos contratos firmados y queremos que lleguen vacunas para poder inocular a la gente”, puntualizó.
Dijo que el mail fechado el 7 de julio pasado se trató de una comunicación más entre “las tantas notas, llamados, Whatsapp y reuniones que tenemos con todos los fabricantes y productores para que puedan llegar vacunas a la Argentina lo antes posible”.
Lo que ocurrió con ese mail, explicó, es que cuando hay retrasos en los envíos “nos ponemos serios y exigimos lo que tiene que llegar” porque “sabemos que hay muchas personas que están esperando su segunda dosis y nuestra responsabilidad como funcionarios es hacer todo lo posible” para cubrir esa necesidad, puntualizó.
Nicolini relativizó de esta manera la nota filtrada y publicada en varios medios y en la que advirtió al RDIF que la Argentina está «en una situación muy crítica» por la faltante del componente 2 de Sputnik V y que esta situación ponía en riesgo la vigencia del contrato.
«Podemos pensar en algún momento recibir más componente 1 que 2 o pensar en nuevas estrategias, pero necesitamos urgentemente algo del segundo componente. En este punto, todo el contrato corre el riesgo de ser cancelado públicamente», escribió la asesora del presidente Alberto Fernández.
“El compromiso de la Federación Rusa desde el inicio está en cumplir con el contrato”
Durante una entrevista por Radio Con Vos, Nicolini aclaró que ya pasaron tres semanas desde la emisión de ese mail y resaltó que “luego de esa nota, la Argentina recibió hace más de 10 días más de 1,5 millón del componente 2 y el laboratorio Richmond (que produce la edición nacional de esa vacuna rusa) recibió insumos para elaborar más componente 2 en el país”.
“Por eso no quiero puntualizar en esta nota. Hay muchísimas como esa. Tenemos una comunicación constante, diaria, semanal. Esa nota, que es un tanto informal y se hizo pública, no tiene relevancia”, añadió.
Lo relevante es que a través del diálogo, “se activan los mecanismos para encontrar esa soluciones y Rusia responde dentro de las capacidades y alternativas que tiene”, aseveró la asesora y dejó claro que “la colaboración entre Rusia y la Argentina es muy buena, aún previendo las dificultades” por los retrasos en el envío de dosis.
Además, aclaró que, tanto con ese país como con el resto de los productores “hay muchísimas comunicaciones” y entre ellas “no hay lugar para el cansancio”. De la misma manera, ratificó que “los reclamos siguen porque tenemos contratos firmados y queremos que lleguen vacunas para poder inocular a la gente”.
Por ese nivel de insistencia, la Argentina “ya tiene casi 40 millones de dosis” y “está entre los 20 primeros en recibir vacunas”. “Y todo por hablar con los productores, encontrando soluciones y alternativas”, evaluó.
“Necesitamos vacunar a la población entera, no solamente con una dosis sino con dos y siendo que se está pensando en una tercera dosis como refuerzo” frente a la aparición de nuevas variantes del virus y teniendo en cuenta que la comunidad científica aún no determinó si a la actual “hay que repetirla cada año”.
Por lo pronto, “el compromiso de la Federación Rusa desde el inicio está en cumplir con el contrato” de envío de segundas dosis, dijo y recordó que el motivo por el que el gobierno nacional no accedió rápidamente al componente 2 fue porque “hubo una estrategia sanitaria” que priorizó vacunar a la mayor parte de la población con una dosis.
FUENTE: PAGINA 12
