Numerosos e importantes temas de la vida cotidiana tiene la obra presentada por el periodista y escritor chascomunense
“Aquí encontrarás cuentos, relatos, poesías y opiniones personales coincidentes con experiencias que me han contado a lo largo del tiempo y con lecturas verdaderamente valiosas”; afirma el autor en la introducción de esta
propuesta literaria que se suma a ocho títulos encadenados en el transcurrir de los años.
También afirma que éste es “Producto de las opiniones propias y de las que he incorporado como dignos testimonios trata la primera parte de este libro. Por ello éste es, en consecuencia, el libro de muchos.
No busca ser original, pero pretende ser útil y formativo.
Las páginas que luego se fueron sumando, se desprendieron de todo propósito académico.
Aquí, como escritor, pongo a consideración un material, que, por cierto, tiene el objetivo de ser compartido con los lectores.
Habitamos, -dice más adelante -al fin una misma casa que construimos como se construye un libro.
Una temática diferente
En realidad, Fernando Pieske pone a consideración una nueva creación literaria que, ciertamente es diferente a muchos de sus libros anteriores, tanto en poesía como en prosa.
En éste caso no se trata de biografías ni investigaciones periodísticas o históricas. Éste libro contiene numerosos temas de la vida y también experiencias personales en 7 capítulos donde el análisis y la opinión están permanentemente presentes.
Partícipes necesarios
Al dar cuenta de lo que significa la realización de un libro, Pieske sostiene que “Si bien la tarea del escritor es particularmente solitaria, en la elaboración de un libro se integran, lo que él llama partícipes necesarios, a los cuales expresa su reconocimiento: Tal el caso de la composición que estuvo a cargo de Manuela Greco Reeves, el diseño de tapa y diagramación de interior por parte de Ana Laura Rodríguez Uribarri y la ilustración realizada por el artista plástico Paul Hallz.
En tal sentido debe destacarse que el pintor realizó para éste libro un óleo de salientes características y colorida imagen que, posteriormente fue digitalizada ocupando no solo la portada sino también la contratapa y las solapas, dando al conjunto una magnífica presentación.
El prólogo a cargo de Miguel Ángel Saulo es un fiel testimonio de la personalidad del periodista y escritor y de la temática de la obra.
Conceptos destacados
En el libro “La casa que habitas escritores y lectores” presentado por Fernando Pieske, hay además como material destacado, frases que son verdaderos aciertos, muy especialmente en referencia a la temática principal en la propuesta literaria. Por ejemplo cuando el autor sostiene.
Escribir es fácil. Son pocas las condiciones para hacerlo: un lápiz en la mano, un tema dando vueltas y ganas de contarlo.
Después vendrá un lector a concluir el trabajo.
El valor de las cosas
Es necesario tener un lugar para guardar las cosas que consideramos que tienen valor.
Cuando nos preguntamos cuáles son las cosas que tienen valor, debemos decir que son aquellas para las cuales guardamos un lugar.
“Éste libro, sin ser un libro de autoayuda, ayudará siempre a alguien en algo”
En el comentario de contratapa, un lenguaje expuesto con tanta maestría como sencillez, y una profundidad conceptual propia de la química que fusiona al escritor con el periodista que relata y sabe que, quien lo lea, lo entenderá.
Con naturalidad suma prosa y poesía, relatos, vivencias, cuentos, observaciones y reflexiones nacidas del análisis que se realiza con sentido común.
Apuesta a lo positivo, se inclina hacia lo favorable y todo ello le permite brindar un aporte espiritual.
Este libro sin ser un libro de autoayuda, ayudará siempre a alguien en algo.
Los temas son los cotidianos, y, si algo faltase es merecido decir que el buen humor transita en algunos relatos y cuentos, brindando un agregado más a esta elogiable propuesta
En síntesis, éste libro efectúa una clara comparación respecto a la similitud de lo que es construir una obra literaria y construir una casa. “En ambos casos se realiza de abajo hacia arriba, como la vida” concluye Pieske.