El hombre, de 59 años, habría dado muerte a su expareja, de 56, de un fuerte golpe, en su casa de las afueras de La Plata.
La policía encontró y detuvo este mediodía a “El Puma”, el hombre de 59 años indicado de ser autor del femicidio de su ex pareja, Patricia Alejandra Aybar, de 56 años fallecida ayer a raíz de los golpes que recibió en su casa de 80 entre 118 y 118 bis, en La Plata.
El hecho tuvo lugar alrededor de las cuatro de la tarde, en un departamento del primer piso de un edificio ubicado en 80 entre 118 y 118 bis.
El principal sospechoso del crimen, apodado “el Puma” y, cuyas iniciales son J. L. R., era intensamente buscado por los investigadores, quienes hoy dieron con él en una zona de la costanera de Quilmes.
Durante esta jornada, se conoció por declaraciones de allegados de la víctima que la policía estaba tras los pasos del acusado debido a que figuraba “en línea” en su teléfono de WhatsApp.
El sospechoso fue visto salir del edificio donde ocurrió el hecho, en 80 entre 118 y 118 bis. “Iba a toda prisa, subió a un auto blanco y salió arando el asfalto”, indicó un vecino aún en shock por lo sucedido.
“El error de ella fue abrirle la puerta. Es probable que él le haya sacado el teléfono y al revisarlo encontró algo que no le gustó y ahí se enfureció”, estimó Luis, un comerciante cercano y conocido de la víctima, su hija y el supuesto victimario.
Según precisaron fuentes policiales, en base a los elementos hallados en la finca, se sabe que la víctima fue atacada en el sector de la cocina y que habría sido ultimada con un golpe propinado con una baldosa.
Fuentes municipales precisaron que el Centro de Monitoreo aportó imágenes del vehículo Peugeot cuando alrededor de las 15.30 escapó de la zona y circuló por las calles 620 y 80, 117 y 80, 120 y 75, y las entregó a la Delegación Departamental de Investigaciones platense, que interviene en la pesquisa.
La hija de la costurera contó a los efectivos que su madre se había separado del sospechoso por los constantes episodios de violencia que sufría, pese a que la víctima no formalizó denuncias formales en ese sentido.
Luis, un vecino de la costurera, contó en declaraciones periodísticas que “ayer por la tarde Agustina cruzó gritando en pánico diciendo que el padre había matado a la madre” y añadió que la joven le contó que el padre era violento y que por eso se habían separado.
“Agustina contó que él a veces venía y le cocinaba. Se ve que pegaba, después pedía perdón y ella lo perdonaba, pero ella ahora no quería saber más nada. Típico de un femicida”, agregó.
La causa fue caratulada como “homicidio agravado por el vínculo” y quedó a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción 1 del Departamento Judicial de La Plata, que dirige la fiscal Cecilia Corfield. (DIB)