La portavoz de Casa Rosada dijo que es simple opinar desde afuera sobre los problemas políticos de un país y se preguntó por qué no logran un consenso republicamos y demócratas
La vocera de Presidencia, Gabriela Cerruti, desestimó los dichos del embajador de Estados Unidos en la Argentina, Marc R. Stanley, cuando pidió ayer a la clase política “trabajar en acuerdos desde ahora” y no esperar “a las elecciones de 2023″. La funcionaria, al respecto, opinó: “Empecemos por casa. Es muy fácil opinar desde afuera sobre otro país”.
Stanley realizó esa suerte de exhortación al oficialismo y a la oposición en el Council of the Americas, realizado ayer en el hotel Alvear. Hoy, en declaraciones radiales, Cerruti indicó al respecto: “Con [Donald] Trump no les está yendo muy bien por allá [a EE.UU.]. Empecemos por casa para hacer coaliciones, es muy fácil opinar sobre otro país, la situación de cada país es de cada país y cada uno sabe cómo la maneja. Hay que ver si preguntan por qué allá no hacen una alianza los demócratas con los republicanos”.
Luego, en Radio 10, la vocera declaró en ese sentido que la actitud del Gobierno para con la oposición es de diálogo. “Sin duda tenemos que tener acuerdos en los grandes temas y los buscamos en el Parlamento, en el Consejo Económico y Social. En el momento de la pandemia tuvimos todos los acuerdos que teníamos que tener. Es muy fácil opinar desde afuera sobre otro país”, explicó.
“Con mucho respeto, es un embajador más, no volvamos a las épocas en las que lo que decía o dejaba de decir el embajador de Estados Unidos nos importaba tanto como para terminar con la etapa cambiaria”, añadió.
“El julio más difícil de nuestras vidas”
Asimismo Cerruti se explayó sobre el que llamó uno de los meses más complicados de la gestión del presidente Alberto Fernández, cuando se dio la salida del exministro de Economía, Martín Guzmán, y remarcó que fueron momentos muy complicados. “Fue el julio más difícil de nuestras vidas, digámoslo así”.
En medio de una conversación distendida, la funcionaria hizo esa declaración y tras ello remarcó: “Bueno, de la mía por lo menos. Tuvimos un julio muy difícil”.
Además, y en medio de las tensiones generadas por ese cambio clave en el Gabinete nacional (puesto que primero fue ocupado por Silvina Batakis, que estuvo menos de un mes en el cargo porque fue reemplazada por el actual ministro, Sergio Massa), la portavoz de Casa Rosada aseveró que en ese marco “el Presidente jamás pensó en renunciar, nunca consideró eso como opción”.
Cerruti recalcó: “Sabemos el precio que tienen para un país las crisis políticas, económicas y sociales como la de 2001. Por eso tenemos una responsabilidad enorme y siempre hay sectores que buscan generar una devaluación y una crisis porque piensan que cuando peor, mejor y siempre sacan sus ganancias de ahí. Si hablamos de calmar, es porque sabemos el precio que tiene para la mesa cotidiana cuando se profundizan las crisis”.
Por otra parte, explicó que la mayor visibilidad del ministro Massa no significa que Alberto Fernández esté siendo relegado de las instancias decisorias. “Hay una coordinación entre el Presidente y el ministro de Economía, los dos son parte fundamental de la coalición de gobierno representando a diferentes sectores, además son amigos personales así que tienen una relación cotidiana muy fuerte y estrecha”.
Consultada acerca de si Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner, desde ese “julio difícil”, continúan dialogando, dijo: “Hablan cotidianamente y acuerdan todo lo que tienen que acordar”. (DIB)