Sin el ingreso extraordinario de divisas impulsado por el dólar soja, que permitió en septiembre generar una suerte de primavera cambiaria, el Gobierno decidió avanzar en medidas para cuidar las reservas acumuladas con la creación de nuevos tipos de cambio. Con ese objetivo, desde mañana será más caro el dólar para viajar al exterior, comprar los bienes de lujo y organizar recitales de artistas extranjeros.
“Tomamos esta medida porque tuvimos reclamos de cámaras y sectores productivos y porque queremos cuidar las reservas para producción y generación de empleo y no para la fuga”, dijo Carlos Castagneto, titular de la AFIP en un encuentro con periodistas, donde precisó que la decisión “no prohíbe la compra de bienes, paquetes turísticos y consumo de actvidades artísticas, sino que encarece el valor del dólar”.
El principal cambio es el popularizado “dólar Qatar”, por el inminente comienzo del Mundial de Fútbol, aunque alcanzará a todo los consumos con tarjeta en dólares a partir de los US$ 300 mensuales. Desde ahora, esos gastos, incluidos pasajes y hoteles, se pagarán a $ 300, en lugar de $ 262,5, al sumarse una percepción adicional a cuenta de Bienes Personales del 25% sobre la cotización oficial, a la que ya se le retiene un 30% del impuesto PAIS y 45% a cuenta de Ganancias.
La idea es desalentar el uso de los plásticos fuera del país y que los argentinos que viajan usen sus billetes físicos. En julio, el Gobierno incrementó la percepción a cuenta de Ganancias y Bienes Personales del 35 al 45%. En los primeros ocho meses del año, los viajes y otros pagos con tarjeta sumaron US$ 4.600 millones, según el BCRA. Hoy, ese rubro demanda US$ 800 millones por mes, la mitad por paquetes y la otra por consumos en tarjeta en el exterior.
Según estimaciones oficiales, la medida alcanzará a 200.000 personas con consumos de tarjeta en moneda extranjera (7% del total), que gastaron US$ 263 millones, un 81% del consumo total. Mientras que 2,8 millones de consumidores con tarjeta (el 93% restante) gastó US$ 60 millones, un 19% del consumo total. “Todos los consumos hasta hoy no están afectados, es para adelante”, precisaron fuentes oficiales.
Las modificaciones no afectarán el pago de los servicios de streaming, como Netflix, que hoy se pagan al dólar oficial más la suma del impuesto Solidario del 30% más la retención a cuenta de Ganancias del 35%. Así mismo, seguirá vigente el beneficio de no aplicación de Impuesto País y las percepciones para pasajes terrestres a países limítrofes.
Por otra parte, se encarecerá la compra de bienes suntuarios o “de lujo” en el exterior que actualmente están en su mayoría en el anexo del Banco Central con giro de divisas 365 días. Por ejemplo, automóviles y motos de alta gama, jets privados -pequeños aviones; embarcaciones de uso recreativo -barcos; bebidas alcohólicas premium; relojes, perlas, diamantes y otras piedras preciosas, máquinas tragamonedas y máquinas para minar criptomonedas.
En este caso, se establece la aplicación del impuesto país del 30% y las percepciones del impuesto a las ganancias y bienes personales. Considerando un tipo de cambio Banco Nación de $150, el Impuesto PAIS (30%), la percepción a cuenta de ganancias y bienes personales (45%) más la nueva percepción a cuenta de bienes personales (25%) el valor de la operación por dólar proyectado es de $ 300.
En tercer lugar, habrá un nuevo tipo de cambio para eventos culturales contratados en el exterior (recitales, actividades deportivas, entre otros gastos de esparcimiento) con la aplicación del impuesto país del 30%. Considerando un tipo de cambio Banco Nación de $150 más el Impuesto PAIS (30%), el dólar será de $ 195. Además, el artista musical recibe la retención del impuesto a las ganancias que le practica el sujeto local que paga la contratación.
Las medidas estarán vigentes desde este miércoles con su oficialización en el Boletín Oficial. Habrá un decreto del Poder Ejecutivo que amplía el alcance del impuesto PAIS y dos resoluciones de AFIP. Entre ellas, estará también el nuevo esquema de monitoreo de importaciones (SIRA), que reducirá el plazo de vigencia de los permisos de 180 a 90 días, con la posibilidad de que sean prorrogadas por otro 90 días. (DIB)