El diputado estuvo en la presentación de un libro sobre mujeres peronistas en Santa Cruz. Sus palabras parecieron calculadas para alimentar el «operativo clamor» para que Cristina Fernández finalmente sea candidata.
El diputado Máximo Kirchner profundizó la intriga sobre una eventual candidatura de su madre, la actual vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, al afirmar que “yo quiero que gobierne un buen peronista o una buena peronista”, al participar de la presentación de un libro anoche en Santa Cruz.
“No son menores las cosas que suceden a lo largo de nuestra historia y cómo intervienen en el presente que tenemos. Una vieja discusión en la Argentina y que nunca termina de saldarse, por lo que ella decía sobre el antiperonismo… y van a decir quieren que gobierne siempre el peronismo… yo quiero que gobierne un buen peronista, porque peronistas hay muchos, yo quiero que gobierne un buen peronista o una buena peronista….”, afirmó Kirchner.
El líder de la Cámpora pronunció estas palabras en medio del “operativo clamor”, que su sector impulsa para que la Vicepresidenta revea su decisión de no postularse este año, por lo que sus palabras resonaron contra ese fondo. Cuando pronunció estas palabras estallaron los aplausos de la militancia que colmó la sede del histórico comando del Frente para la Victoria ubicado sobre la avenida Néstor Kirchner.
Las declaraciones son parte del diálogo que mantuvo con la historiadora y docente por la Universidad de Buenos Aires Julia Rosemberg, a quien acompañó en la presentación del libro de su autoría “Eva y las mujeres: una historia de irreverencia”, como parte de una actividad conjunta con el Instituto “Néstor Vuelve”.
En ese contexto, Rosemberg y Kirchner hablaron del papel de Evita en el peronismo, la Revolución Libertadora del ‘55 y la forma en que en los años ‘70 la figura de Eva Perón creció de la mano de la militancia peronista.
El diputado nacional vinculó la proscripción del ‘55 con el actual presente electoral de su madre: “A las claras está que la persona que reúne la mayor cantidad de votos de manera individual en Argentina no se puede presentar, por esto que -tan bien describió- sucedió en la Argentina del ‘55 en adelante: todo tipo de abusos y atrocidades bajo el nombre de Revolución Libertadora, después conocida como fusiladora. Esa es la historia”.
Los dichos de Máximo se dan una semana después de que cuestionara la precandidatura del presidente Alberto Fernández en la reunión en la sede de la calle Matheu, en la ciudad de Buenos Aires, donde apuntó que era extraño que un presidente en ejercicio compitiera en una interna con otros candidatos, en muchos casos funcionarios de su administración. Anoche, Máximo también recordó como Cristina Kirchner fue quien eligió a Alberto Fernández y según sus palabras, “resuelve la cuadratura del círculo, y conduce al peronismo a una victoria”.
Durante el diálogo en el que se fueron intercambiando preguntas con Rosemberg, Máximo destacó las dificultades de las mujeres peronistas a participar en política y recordó el atentado que sufrió su madre el pasado 1° de septiembre.
“La mejor manera de resolver las cosas en democracia es a través de la representación y el voto, pero la descarga de odio que hay -y esto uno lo vive- ya no solo en la figura de Eva o de Cristina… Y lo vimos alguna vez acá con la compañera gobernadora Alicia [Kirchner] cuando la golpearon a la salida [de un restaurante] o con el episodio donde Alicia y Cristina quedaron encerradas [en la gobernación de Santa Cruz]”, enumeró Máximo Kirchner.
En ese contexto recordó la noche del 1° de septiembre del año pasado, cuando dijo el estaba cenando con amigos luego del día de trabajo y lo llamaron para contarle lo sucedido en la puerta del departamento de Cristina. “Al rato empezás a ver las imágenes de una personas disparando en la cabeza de la dos veces presidenta y actual vicepresidenta”, recordó.
En ese contexto y sin mencionar por su nombre a María Eugenia Vidal, relativizó las denuncias que hizo mientras fue gobernadora de Buenos Aires. “Peleaban contra las mafias supuestamente en la provincia de Buenos Aires; parece que el 11 de diciembre del 2019 las mafias olvidaron las peleas y ahí andan y no duerme en una base naval”, dijo, y agregó: “Digo la construcción de alguien que dice que pelea contra algo y se arma un escenario para convencer, porque cuando una persona en serio pelea contra algo, en la puerta de su casa le quieren disparar en la cabeza”.
Para Kirchner hay una fuerte “descarga de odio” y obsesiones en los medios contra las mujeres peronistas que ejercen cargos. Mencionó como ejemplo a la intendente de Quilmes, Mayra Mendoza, a Luana Volnovich, directora ejecutiva del PAMI, y a Fernanda Raverta al frente del Anses.
Máximo Kirchner viajó a Río Gallegos para pasar aquí el aniversario del nacimiento de su padre, Néstor Kirchner, quien mañana cumpliría 73 años, y aseguró que el martes estaría de regreso en Buenos Aires. (DIB)