En Buenos Aires se registró un brote en la localidad de Chacabuco, lo que implica que toda la Provincia está bajo la condición de afectada – SENASA dispuso la suspensión de todo movimiento de caballos, incluyendo eventos como las carreras hípicas y las fiestas de destreza criolla
Se conoció, a través de las redes sociales, que por disposición de SENASA debido al brote de encefalomielitis equina fue suspendida la Fiesta de las Escuelas Rurales en El Tamborcito de Chascomús el día 3 de diciembre.
SENASA dispuso la suspensión de todo movimiento de caballos, incluyendo eventos como las carreras hípicas y las fiestas de destreza criolla. Se determinó que “se prohíben los movimientos de egreso de equinos desde las provincias afectadas, en las que se ha diagnosticado la enfermedad, al resto del país”.
En Buenos Aires se registró un brote en la localidad de Chacabuco, lo que implica que toda la Provincia está bajo la condición de afectada.
“Los organizadores de eventos de concentración de equinos deberán exigir antes del ingreso que el animal cuente con una vacunación vigente para Encefalomielitis Equina del Este y del Oeste aplicada al menos QUINCE (15) días antes del movimiento”. Sin embargo, en la Argentina no hay disponibilidad de la vacuna, por lo que deberá esperarse hasta que llegue al país para comenzar la vacunación.
En la zona, esta medida implica la suspensión de algunos eventos como las carreras en el Hipódromo Dolores. También peligra la realización de las actividades con equinos en la Fiesta del Gaucho, prevista para los días 8, 9 y 10 de diciembre en General Madariaga, y complica las perspectivas del festival de destreza criolla más grande del país, que se realizará en Jesús María, Córdoba, a partir del 5 de enero próximo.
Hasta la fecha fueron confirmados cuatro brotes de encefalitis equina: dos en la provincia de Corrientes (departamentos de Lavalle y Mercedes), uno en Santa Fe (San Cristóbal) y uno en Buenos Aires (Chacabuco).
Qué es la encefalitis equina
La encefalitis equina es causada por un virus del tipo “alfavirus” que ya desde 1938 se descubrió que no sólo afecta a los caballos sino también a los humanos. Los reservorios naturales del virus serían aves y roedores, pero aún en la Argentina no están identificados completamente.