El dato marca una desaceleración uferte respecto de enero, cuando había dado un 20,6%. Poco antes de su difusión, el presidente Javier Milei había dicho que 15% era «un numerazo».
La inflación de febrero fue de 13,2%, según el Índice de Precios al Consumidor (IPC) informado este martes por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). El aumento interanual llegó al 276,2%.
Este indicador se conoce luego de que en enero se registrara una suba del 20,6% y en diciembre, del 25,5%, la más alta desde marzo de 1990.
Según se desprende de los datos publicados esta tarde por el organismo estadístico, la inflación en los dos primeros meses del año fue del 36,6%, periodo en que la caída del salario formal alcanzó en promedio el 20% y en los últimos doce meces el 276,2%.
Esta mañana, horas antes de que se publicara la cifra, el presidente Javier Milei había afirmado que continuaría la tendencia a la baja que había comenzado el mes pasado. “Parece que está debajo del 15, con lo cual es un numerazo”, enfatizó el mandatario.
La inflación del primer bimestre explica en parte esa caída del 20% -en promedio- de los salarios formales, mientras que el dato interanual refuerza la percepción de lo agudo de la crisis: es el segundo más alto desde el pico de marzo de 1991, cuando llegó a 287,3%.
En la discriminación rubro por rubro, el Indec informa que el que más que más aumentó fue Comunicación, con un 24,7%, seguido de Transporte, 21,6%; Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, 20,2%.
Alimentos y bebidas tuvo un incremento importante, del 11,9%, pero inferior al que venía registrando: 20,4% en enero, 29,7% en diciembre, 15,7% en noviembre, 7,7% en octubre, de 14,3% en septiembre y de 15,6% en agosto).
En un comunicado oficial, la Oficina del Presidente Javier Milei marcó la “desaceleración de los precios con respecto a diciembre 2023 (25,5%) y enero 2024 (20,6%)” y la atribuyó a “la fuerte disciplina fiscal” que impuso el gobierno. Es decir, a la consecución del superávit de las cuentas públicas, que se consiguió con restricción de la emisión y ajuste del gasto, pero también con paralización de obras, pérdida del poder adquisitivo de las jubilaciones e incumplimiento con empresas del área energética, como Cammesa, que hacen que su sostenibilidad esté en duda para muchos economistas.
La Casa Rosada insistió con la hipotética inflación “camino al 15.000%” que tantas veces mencionó el presidente Javier como uno de los legados del gobierno de Alberto Fernández. El comunicado reafirma el “compromiso asumido” por Milei para luchar “con uñas y dientes” contra esa inflación.
Por su parte, el ministerio de Economía difundió un comunicado en el que considera que “esta dinámica es resultado del programa económico implementado por el Gobierno a partir de diciembre. El mismo apunta a ordenar las variables macroeconómicas y a estabilizar expectativas mediante la combinación de las anclas fiscal, monetaria y cambiaria con medidas de normalización y desburocratización del comercio”.
El número de inflación, que lleva la línea de pobreza para una familia tipo en el AMBA a $690.000– se relaciona con la reunión que mantuvo días atrás el ministro de Economía Luis Caputo, con representantes empresas productoras de alimentos, preocupado por los incrementos de precios en el sector.
Luego de eso, esta mañana el gobierno anunció, a través del portavoz Manuel Adorni, una apertura total de la importación de productos alimenticios. Se trata de una estrategia destinada a hacer bajar los precios a través del aumento de la oferta, que otras veces se ha intentado en Argentina.
“Se tomó la decisión de abrir definitivamente las importaciones de determinados productos de la canasta familiar en pos de hacer los precios más competitivos con alguna quitas de impuestos”, indicó Adorni. (DIB) AL