«Si me dan más de tres fechas, saco el fierro del auto», dicen que le dijo el jugador a un empleado de la Liga Comercial de Fútbol, tradicional competencia amateur de la ciudad. El implicado lo desmiente.
Un futbolista que juega en la categoría Veteranos de la Liga Comercial de Fútbol, tradicional competencia amateur de Bahía Blanca, irrumpió en la sede de la entidad y amenazó a un empleado administrativo en disconformidad con una probable sanción disciplinaria por su comportamiento en las canchas. “Si me dan más de tres fechas, saco el fierro del auto”, habría advertido Gonzalo Hernán Nani, jugador de Sea White de 46 años, acompañado por otra persona que no fue identificada.
El episodio que desencadenó las amenazas se produjo el fin de semana pasado y desde entonces transcurrió tiempo suficiente como para tensiones. “No somos sommeliers de amenazas, si hace lo que amenazó con hacer y no tomamos ninguna medida, estaríamos en un problema”, dicen desde la Liga.
“Nada que ver lo que están diciendo”, se defendió el propio Nani, en diálogo con La Brújula 24. “Fui antes de las 19 y el ‘flaquito’ que atiende estaba bajando las persianas. Le dije que quería hablar con alguno para que saquen la sanción: le pegaron un codazo a un compañero y después a mí en la mandíbula. Me lastimó, no pude masticar ni sábado ni domingo. Le quería mostrar la cara a alguno del Tribunal de Penas, porque me terminaron echando a mí y estaba muy caliente”, sigue el relato del futbolista.
Siempre de acuerdo con lo publicado por La Brújula 24, Nani comentó que el trabajador de la Liga le dijo que el Tribunal de Penas “trabaja a puertas cerradas” y que se le iban a “reír en la cara”. “El referí no cobró foul, ‘siga siga’, pero todavía me duele la cara. Le dije que tenía que hacer justicia por mano propia, un fierro en la cabeza al referí y después al que me pegó a mí”, apuntó, pero aclaró: “No es que fui con un fierro, le pregunté si tenía que venir con un fierro para partírselo en la frente al referí o al que me pegó. Se pasan, no pensé que iban a hacer esto. Me dijeron que fuera al otro día para saber la sanción, que me iban a dar el doble por ser capitán. No me tendrían que dar ninguna fecha, tendrían que echar al que me pegó a mí y a mi compañero”.
De acuerdo con el portal La Nueva, que cita a dirigentes de la Liga, los enojos de jugadores que van a ser sancionados son habituales, pero en este caso advirtieron que el tono fue más pesado y por eso decidieron tomar medidas preventivas. Según se informó, la sede liguera permanecía cerrada al menos durante este jueves y se barajaba la posibilidad de no jugar la fecha de este fin de semana.
La denuncia fue radicada esta mañana en Fiscalía y en la misma también se da cuenta de que en ese mismo lugar, además de la Liga, también se brindan actividades para niños, lo cual hizo subir el nivel de alarma, consigna La Nueva. (DIB) GML