Tal como adelantamos ayer, la elección interna de la Unión Cívica Radical en la Provincia de Buenos Aires, llegó a la justicia.
Pablo Domenichini, pidió al Juzgado Federal N°1 con competencia electoral, que ordene a la Junta Electoral Partidaria revocar la resolución interna con el escrutinio provisorio que dio por ganador a Miguel Fernández como nuevo presidente del Comité Provincia de Buenos Aires.
“Fuimos a la justicia a pedir dejar sin efecto este escrutinio provisorio que es parcial- dijo Domenichini a La Nacion-. El manejo de la junta desde el oficialismo hace que falte transparencia”, acusó el diputado.
Se trata de un recurso de apelación interpuesto por los apoderados de la lista Futuro Radical contra la resolución 66/2024 de la Junta Electoral partidaria – que dio cuenta del escrutinio provisorio de la interna del domingo -por considerar ese acto “manifiestamente parcial y arbitrario”. Más aún “que no tiene otro objeto que formar opinión pública y confundir a los afiliados”
En el escrito la lista Futuro Radical, que contó con el apoyo de Martín Lousteau y de Facundo Manes denunció – mediante los apoderados de su lista- que la Junta Electoral interna del comité provincia actuó “en forma irresponsable” y “ha procedido a dar difusión de resultados con un pretendido carácter oficial, extralimitándose en sus funciones, no garantizando la fiel comunicación de la totalidad de los datos”.
Fue más allá y denunció que la junta electoral partidaria “ha perpetuado en complicidad con algunas juntas electorales locales de distritos con clara vinculación con el oficialismo partidario la configuración la configuración de un esquema que consolidó condiciones previas, durante y posteriores al comicio para imponer el resultado electoral del proceso interno provincial”
Señaló, en concreto, que desde la Junta interna de San Isidro – vinculada a Gustavo Posse- se habría registrado un manifiesto intento por impedir la fiscalización de la lista en los comicios.
Se denunció, además que no se le dio traslado por impugnaciones realizadas en el recuento de votos de los distritos de Quilmes y Villarino. Y denunció que mientras los datos de Villarino se cargaron los datos impugnados no se cargaron en cambio los datos de Quilmes “principal territorio con representatividad de nuestra fuerza”.
Precisó, además, que “para el caso de Azul, La Matanza, Florencio Varela, Lanús y Quilmes, la Junta Electoral provincial ha cargado resultados que no representan la totalidad de los votos”, en lo que consideró: “ocultando una maniobra que tiende generar un generalizado estado de confusión entre los afiliados y afiliadas del partido”.
“Esperemos que la junta electoral partidaria se expida cuando antes con el escrutinio definitivo”, dijo Domenichini. “Y una vez que la junta se decida a escrutinio definitivo volveremos a ir a la justicia, si es necesario”, advirtió.
Desde el comité nacional de la UCR – que preside Martín Lousteau, aliado a Domenichini- se sigue con atención el devenir de la compulsa ante la justicia. “Hay dos lados. Uno dice que ganó y presenta todas las actas – el de Domenichini- y otro- que es el actual oficialismo- dice que ganó pero elimina de su recuento algunos distritos sin que haya claridad en sus razones”, evaluó una fuente nacional que sigue con atención el devenir del resultado en provincia.
La resolución de la Junta Electoral del radicalismo menciona que se hicieron dos impugnaciones. Una de ellas la formalizaron Emiliano Bursese y Fernando Pérez, apoderados de la lista de Domenichini, que cuestionaron el resultado de una mesa en la localidad de Médanos; la otra la realizó el apoderado de la nómina de Fernández (Andrés Villalva), que impugnó el resultado del distrito de Quilmes por “poseer una diferencia más que significativa de lo que surge del acta de la junta electoral local con sus certificados de escrutinio”.
Los resultados que tiene la lista de Domenichini, producto de su propio recuento, lo dan ganador por 516 votos.