Rafael Moreno, de 74 años, excabo primero de la Policía Federal, asesinó a Sergio David Díaz de un disparo en el abdomen porque no bajaban la música durante los festejos.
El policía que cumple prisión preventiva por matar a su vecino luego de una discusión por el volumen de la música, la mañana de Navidad, deberá seguir detenido, según resolución de la fiscalía. El titular de la Unidad Fiscal de Instrucción y Juicio Especializada en Homicidios Dolosos realizó su pedido hoy y se deberá esperar a la decisión del juez para definir si el hombre continúa preso o queda en libertad. Según fuentes judiciales, la defensa del acusado, mañana en audiencia, se va a oponer.
El hecho se produjo el 25 de diciembre y al otro día se conoció un impactante video de la pelea y el crimen sobre la vereda de la calle Acevedo al 4.100, en Lomas del Mirador. En el episodio, Rafael Moreno, de 74 años, excabo primero de la Policía Federal Argentina (PFA), asesinó a un vecino de un disparo en el abdomen porque no bajaban la música durante los festejos. Moreno mantuvo una discusión con Sergio David Díaz con su arma de fuego en la mano. En un momento, los dos hombres quedaron casi con sus cuerpos pegados y el exagente le disparó a Díaz, de 40 años, apoyándole el arma por encima del ombligo.
Según la fiscalía, hay varios elementos para sostener la prisión preventiva, como la falta de contundencia en las declaraciones del acusado, el pasado de Moreno como policía retirado, la reacción que tuvo luego de dispararle a Díaz y la distancia con la que efectuó el disparo.
De acuerdo con la agencia Noticias Argentinas, en la última declaración que dio el acusado, mencionó: “Yo el arma la llevé para intimidar, no con la intención de usarla. Me empezaron a agarrar del cuello, a empujar para atrás y me largaron un par de puñetazos. En ese momento se me dispara el arma, nunca tuve intención”. Sin embargo, el fiscal rebatió esa justificación y agregó: “En los videos se logra ver perfectamente el instante en que Moreno, previo a apoyar el arma en el abdomen de la víctima, manualmente rebatió el martillo percutor para poder efectuar el disparo en una simple acción”.
Según el fiscal, luego del ataque, el acusado “no adoptó un temperamento activo para remediar el disparo que él mismo calificó como accidental”.
Por las características macroscópicas del orificio de entrada, la distancia del disparo que ejecutó el policía retirado “sería corta”. Por ese motivo, no solo se pidió que se mantenga la prisión preventiva, sino que la causa sea calificada como “homicidio agravado por el uso de arma de fuego en concurso real con portación ilegal de arma de guerra”. (DIB) GML