En la Provincia
En pocos meses Chascomús sufrió un cimbronazo en dos empresas, Emepa que despidió a 80 empleados y la planta de aguas Villa del Sur dejó sin trabajo a 34 personas, mientras que el resto de los trabajadores tuvieron que tomar vacaciones forzadas, a los que se suman los 62 despidos de la fábrica tecnológica Unitec Blue.
En medio de la crisis que atraviesa el sector productivo en la provincia de Buenos Aires con subas de costos y caída del consumo que llevaron al cierre de empresas de distintos rubros, el Ministro de Trabajo bonaerense, Marcelo Villegas, negó que exista una situación de despidos masivos que genere preocupación al Gobierno.
“Hoy no tengo la necesidad de enfrentar despidos masivos, pero sí algún bloqueo o quite de colaboración por despido de cuatro o cinco trabajadores”, aseguró Villegas al analizar el panorama laboral en la provincia de Buenos Aires. En ese sentido, destacó que “lo que más se da es el cambio del tipo de trabajo, que eso hoy genera un problema.
O el despido de algún trabajador conflictivo”.
Sin embargo, tal como publicó DIB días atrás, mayo fue un mes crítico para el empleo, la industria y el comercio en la provincia, en especial en el interior, donde hubo cientos de despedidos que se sumaron a otras personas que perdieron su fuente laboral desde que comenzó éste año.
En declaraciones a La Nación, Villegas afirmó que “lo que más se da es el cambio del tipo de trabajo, que eso hoy genera un problema. O el despido de algún trabajador conflictivo”, completó Villegas, en una interpretación que ya causa bronca en el ámbito gremial y cierto pudor en el empresarial ante una inocultable crisis del empleo.
Las expresiones del Ministro causaron sorpresa porque, desde que asumió María Eugenia Vidal, justamente, se han dado incontables situación de despidos masivos, tanto en el ámbito privado como en el estatal. Es más, a raíz de ello, varios distritos han declarado la emergencia laboral o van en camino de hacerlo (Azul, Baradero, Zárate Coronel Suárez, Pilar, Olavarría, Chascomús, Punta Indio y Roque Pérez).
Sin hacer mención en su relato, Villegas insistió en no relacionar los problemas sindicales con la merma de la actividad. “Hay un nivel de conflicto acotado, sobre todo en el conurbano, y más relacionados con comisiones internas que no responden a su conducción gremial”, puntualizó.
Cabe destacar que sólo en mayo, Chascomús sufrió un cimbronazo en dos empresas, bastiones de la economía local: la metalúrgica Emepa despidió a 80 empleados y la planta de aguas Villa del Sur dejó sin trabajo a 34 personas, mientras que el resto de los trabajadores tuvieron que tomar vacaciones forzadas. A este panorama, se suman los 62 despidos de la fábrica tecnológica Unitec Blue en abril pasado.
En otras localidades
Hace semanas nada más, también Roque Pérez estuvo al borde del descalabro por la parálisis sorpresiva de la avícola Criave, la cual aporta casi dos mil puestos de trabajo –entre directos e indirectos- en una ciudad de 12 mil habitantes. Fue el propio Villegas el que tuvo que “enfrentar” ese conflicto con varias reuniones en La Plata. La sangre no llegó al río pero la salida no fue la ideal: mitad de horas y mitad de sueldo para todos.
Para tomar otro episodio de 2018, hay que recordar el dramático cierre de Fanazul en Azul, una dependencia de Fabricaciones Militares que fue discontinuada, en el marco de un plan de reducción del Estado nacional, dejando sin sustento a 250 familias. Un 2018 que había empezado, también con los casi 200 despidos de la UEP (Unidad Ejecutora Provincial) de la Dirección General de Cultura y Educación.
En 2017, Zárate fue un caso paradigmático. Allí, los sucesivos zigzagueos en torno a las obras pensadas para el Complejo Nuclear de Atuchatuvieron consecuencias incalculables, aunque algunos se animan a cuantificar en casi 3000 mil los puestos perdidos para el gremio UOCRA. El año pasado también continuaron los problemas en Cresta Roja, la otra avícola importante.
El 8 de mayo, Infocielo publicó un detalle de las empresas provinciales que habían tenido que cerrar sus puertas o reducir su personal por la caída del consumo sólo en 2018, que fue difundido por EL FUERTE.
Finalmente, a las ya mencionadas en esta nota habría que agregar a Karavell (textil de Mercedes), Paquetá (textil de Chivilcoy), Maitén (panificadora de Chacabuco), Motomel (automotriz de San Nicolás), Newman (electrodomésticos de Campana), Dass (textil de Coronel Suárez) Metalúrgica Delgado (Luján), entre otras.
Leave a Reply