El actor chascomunense que integra el elenco de la famosa serie argentina, reveló su experiencia de sus grabaciones en la ex cárcel de Caseros. “La cárcel es oscura y tétrica” dijo, y “me ayudó a meterme en el personaje…”
El actor de 24 años, Rodrigo Noya, quién debutó en el cuarto capítulo de la exitosa serie de Sebastián Ortega, relató lo difícil que fue encarar ese personaje. “La cárcel es tétrica, fría. Nos han contado historias de los pasillos, cosas que pasaron… Al tener al equipo de trabajo y estar todos juntos, hizo que fuera mucho más llevadero. Pero no sé si me quedo una noche solo ahí. Es bastante oscuro. No es un lugar con energía positiva” dijo el actor.
Oaky, el personaje de Noya en El Marginal 2, es un joven que regresa al penal San Onofre después de haber estado durante mucho tiempo en el Hospital tras una golpiza -lo tiraron de la terraza- propiciada por la banda del Sapo, personificado por Roly Serrano.
“La puesta en escena que armaron te hacía sentir que estabas dentro de una villa, en una cárcel de verdad”, confiesa el actor en una entrevista con Teleshow al hablar sobre la escena de su regreso al patio donde se encuentra con los personajes Mario Borges y Diosito. Rodrigo, quién tuvo que hacer una audición para ser elegido para el personaje agregó: “Era la primera vez que hacía de un preso, y quería ver qué me pasaba con esa situación”.
Noya, decidió encarar el personaje sin los anteojos que lo caracterizan para despegarse de la imagen que tienen de él “Mi personaje es un chico que viene de la calle que cuando llegó a la cárcel encontró un refugio en el que busca aprender e instruirse. Además es un referente, un pibe de armas tomar al que tienen como ejemplo a seguir en la villa” relató el joven de Chascomús.
Fuente: El Cronista
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