La exgobernadora tuvo un encuentro virtual con su exgabinete y pidió no confrontar con el Gobierno por el curso de la crisis sanitaria
La excusa fue casi personal, íntima y de reencuentro, luego de cuatro años de trabajo conjunto y algunos meses sin contacto directo. «Quiero que me cuenten cómo están, cómo se sienten», rompió el hielo María Eugenia Vidal ante unos 20 integrantes de su exgabinete bonaerense, durante una extensa reunión virtual que había sufrido postergaciones por la pandemia del coronavirus. La exgobernadora, recuperada tras dar positivo de Covid-19, hizo una fuerte defensa de la «unidad» de Juntos por el Cambio y un pedido de «no confrontar» con las políticas sanitarias de la Casa Rosada y el gobierno de su sucesor, Axel Kicillof. Su postura está a tono con la posición del ala «dialoguista» del macrismo y la coalición opositora.
La convocatoria, contaron al diario La Nación tres de los dirigentes presentes, tuvo asistencia casi perfecta. «El que faltó, le avisó a María Eugenia que no podía. Todos quisimos estar», afirmó un exministro que fue parte del encuentro, que duró más de dos horas y en el que varios se quedaron sin hablar por falta de tiempo.
Luego del repaso de la actualidad de cada uno y las bromas de rigor -el hoy funcionario porteño Roberto Gigante, por caso, fue saludado por su cumpleaños- los exministros analizaron la coyuntura desde su perspectiva. El hoy jefe del bloque macrista en Diputados, Cristian Ritondo, exministro de Seguridad, trazó el panorama parlamentario, mientras Andrés Scarci (ex ministro de Salud) abordó las consecuencias de la pandemia y Marcelo Villegas, ex ministro de Trabajo bonaerense, comentó acerca del mercado laboral y el proyecto de teletrabajo que se debate en el Congreso.
Cuando le tocó hablar, Vidal fue enfática al reafirmar la «necesidad» de que la coalición opositora, que hoy distingue su «ala dura» de la dialoguista, se mantenga unida. «Voy a trabajar incansablemente por la unidad con la UCR y la CC-ARI», dijo la exgobernadora, y extendió esa vocación a las diferencias dentro de Pro con el sector que encabeza la titular partidaria, Patricia Bullrich.
«Hay que convivir con la diversidad. No peleemos porque sí, ya llegará el momento. Esto no se puede ni se debe romper», afirmó la exmandataria, ya recuperada y con agenda completa luego de la cuarentena que siguió a su testeo positivo de coronavirus, hace poco más de un mes.
Prudencia con el Gobierno
Otro exministro bonaerense describió como «prudente» la postura de Vidal en relación al manejo de la pandemia por parte del presidente Alberto Fernández y el gobernador Kicillof. «No podemos obstaculizar ni poner palos en la rueda», fue el pensamiento que transmitió, «porque ellos gobiernan, nosotros perdimos».
Cercana a Horacio Rodríguez Larreta -con quien conversa a diario- y a Martín Lousteau, y mientras intenta reconstruir «puentes» con el sector de Rogelio Frigerio y Emilio Monzó-hicieron las paces con el extitular de la Cámara baja en aquella reunión que trascendió luego de la noticia de su contagio- Vidal también destacó el rol de su vice, el radical Daniel Salvador, en momentos de reacomodamientos en la UCR bonaerense. «Lo quiso rescatar, en un momento de cuestionamientos para él», argumentó un testigo.
¿Se habló de Mauricio Macri? «No, pero Mauricio es imprescindible para la coalición», matizó otro de los presentes, a quien le quedó la sensación de una Vidal «muy activa, que quiere participar en política» y que piensa seriamente en las citas electorales que se vienen. (La Nación – Por Jaime Rosemberg)