El Gobierno creará un fideicomiso para gestionar garantías. Un reporte de Fitch Solutions Macro Research advertía que la financiación corría riesgo por la corrupción del sector.
A fines de enero, el Gobierno nacional lanzó el llamado a licitación para la construcción de corredores viales mediante el esquema de Participación Público Privada. Se trata de un modelo que prevé un reparto en las cargas de los riesgos que implica la financiación de obras de envergadura. Se pide, así, que sean los privados contratistas los encargados de gestionar la financiación de los proyectos que luego es pagada por el Estado una vez concluida la obra. En mayo hubo euforia oficial: se presentaron más de 30 firmas interesadas en construir corredores viales con costos más bajos de lo pensado y en el marco de un presupuesto que oscila entre los US$ 6.000 millones. Pero la crisis cambiaria y financiera y el escándalo de sospechas de coimas que involucra a decenas de empresas de la obra pública, es una amenaza constante a golpear de raíz la nueva herramienta. Plan blindaje. El corazón del sistema es la credibilidad de las empresas. Esta se ve reflejada cuando las firmas salen a buscar apoyo financiero para encarar proyectos de gran envergadura. Un requisito para participar de las licitaciones es contar con el compromiso de la banca y de fondos de inversión para garantizar el financiamiento de las obras. La mayoría de las firmas que se presentaron para construir los seis corredores viales lograron un aval previo, pero los fondos aún no están garantizados, mientras sigue el desfile de empresarios y ejecutivos arrepentidos en Comodoro Py. “ Hoy las empresas están trabajando, revisando procesos y negociando con los bancos para consolidar los compromisos de financiamiento logrados”, cuenta un empresario del sector. Desde el Gobierno, en las últimas horas decidieron abrir el paraguas. El ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, confirmó el viernes por la noche que trabajan en el armado de un fideicomiso, administrado junto al Bice, para canalizar garantías de los bancos en caso de que se caigan los financiamientos gestionados por privados. Riesgo alto. La reacción del Gobierno da cuenta de un impacto real, del cual aún no se conoce su intensidad. Un trabajo de Fitch Solutions Macro Research de este mes ya advertía que “las crecientes percepciones de corrupción pueden influir en la capacidad de las empresas nacionales para obtener el financiamiento necesario para avanzar en proyectos, ya que los inversores y los financieros eligen esperar a que las consecuencias del escándalo se aclaren”.
En particular, sobre el esquema de PPP el mismo informe advertía: “las asociaciones público-privadas que dependen en gran medida del financiamiento privado, estarían en riesgo de una disminución de la confianza de los inversionistas en la financiación de proyectos. Esto amenazaría el avance de seis proyectos de PPP de carreteras adjudicados a principios de este año que requieren US$ 6.000 millones de inversión que aún no han alcanzado el cierre financiero”. Primero, el mercado. Con todo, desde la Cámara de la Construcción filial Córdoba creen que el factor que más amenaza a la actividad y a las PPP es el endurecimiento del crédito, por encima de las derivaciones judiciales de los cuadernos de Centeno. Marcos Barembaum, presidente de la filial Córdoba de la Cámara Argentina de la Construcción, señala: “Lo de los cuadernos es un tema aparte, son circunstancias puntuales. El mecanismo de PPP vino para quedarse. Sí creo que la situación financiera actual conspira contra las empresas o los interesados para que puedan obtener el financiamiento a largo plazo que esto requiere. Están difíciles los mercados, los proyectos que se lanzaron ojalá puedan resolver su financiamiento de forma adecuada”. Según el empresario, los PPP “son una herramienta interesante, pero tampoco es la panacea y la solución universal. Hay proyectos que son financiables por PPP y hay proyectos que no”. Impacto en otros países. En esta línea, Barembaum destaca que, aunque este esquema ganó terreno en otros países, está lejos de reemplazar la ejecución tradicional de obra pública. En ese sentido, la Cámara visitó Chile para intercambiar la experiencia que tuvo ese país bajo el programa de PPP. “Fuimos a mirar cómo funciona allá, los funcionarios nos aclararon que los PPP representan el 30% de los proyectos de infraestructura que encara Chile y en otros lados es menos. No reemplaza la inversión por presupuesto que tiene que seguir existiendo”. La Provincia, en análisis. La Provincia adhirió a la Ley de PPP cuando salió y actualmente analizan la viabilidad de algunos proyectos presentados. Roque Spidalieri, subsecretario de Financiamiento del Ministerio de Inversión y Financiamiento de la Provincia de Córdoba comentó, en un encuentro en la Bolsa del Comercio, que la Provincia está abierta al esquema y comenzó a recibir iniciativas, pero que hasta el momento no habían llegado proyectos con alternativas de financiamiento superadoras a los que podía conseguir la administración provincial. Silencio sobre los cuadernos. Las autoridades de la Cámara de la Construcción de Córdoba no quisieron emitir opinión oficial sobre el escándalo de los cuadernos de Centeno que involucra a decenas de empresarios y ejecutivos del sector. “Creemos que no es conducente opinar, está en manos de la Justicia que está actuando en lo que tenga que ser”, apuntó Barembaum.
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