Tenía 78 años, y sufrió un accidente doméstico que tuvo secuelas que se complicaron. Manal, el grupo que fundó fue inmensamente influyente a pesar de que solo grabó dos discos.
Javier Martínez, el frontman de Manal, primer artista en adaptar el blues al castellano y uno de los padres fundadores del rock argentino, murió hoy a sus 78 años por las complicaciones de un accidente doméstico luego de pasar un período internado en terapia intensiva.
“Lo acompañaremos en su viaje a la Eternidad por siempre y para siempre. ‘Cuando uno no tiene más nada que decir, comienza el viaje de callar’ Javier dixit, 1/5/2024”, escribió la hermana del fundador de Manal que el viernes había dado a conocer su estado de salud.
El fallecimiento puso de luto a la cultura argentina porque Martínez es ampliamente reconocido por su influencia entre sus pares a partir de la década del 60 y, después, por las generaciones sucesivas.
Nacido en Berazategui en 1946, Martínez integró a comienzos de los 70 el trío Manal –fue baterista, cantante y letrista- junto con Alejandro Medina y Claudio Gabis. La banda está considerada una de las pioneras del rock en la Argentina a la par de Almendra y Los Gatos.
En 1970 lanzaron su álbum debut, llamado con el nombre de la banda, pero popularizado como La bomba. Martinez fue el autor de todos los temas del disco, que incluye clásicos como “Avellaneda Blues” y “Jugo de tomate” y es considerado como uno de los trabajos cumbre del rock en castellano.
A partir de ahí, nada fue igual, para ellos ni para el rock local. Ellos tres quedaron marcados para siempre con el honor y el peso de haber creado un sonido único, original e inimitable. Y el rock local llevó en alto su estilo y homenajeó en muchas oportunidades a sus canciones emblemáticas.
Manal sacó un segundo disco en 1971 (El león, con el hit Doña Laura) y Javier luego emigró a España, no sin antes participar en los legendarios festivales B.A. Rock. También grabó con Billy Bond y La Pesada del Rock, esa suerte de seleccionado de grandes talentos. En el disco Buenos Aires Blus, por ejemplo, cantó una gema llamada Entonces qué.
Radicado en Francia en los 80, Martínez protagonizó un auténtico tour de force al conseguir el récord mundial de tiempo ininterrumpido tocando la batería. Fue en Toulon, en 1985. Fue en un torneo benéfico y su marca fue de 41 horas y media, con un intervalo de cinco minutos para comer.
De vuelta en la Argentina, en 1987 formó Manal-Javi, que duró hasta 1990. Después armó un trío con ese nombre, al que siguió en 1993, la Javier Martínez Blues Band. Más cerca en el tiempo formó Manal Javier Martínez, con mucha influencia del jazz y volvió a tocar con Gabis y Medina. En 2010 fue designado ciudadano ilustre de Berazategui. (DIB).