Lo peor todavía no pasó
La inflación volvió a acelerarse en los primeros meses de este año, sin embargo, varios analistas aseguran que todavía queda parte de la devaluación que se dio desde el año pasado que está contenida y que todavía no se refleja en el índice de precios, a la espera de una recuperación de la actividad para pasarse a los precios finales. «Hay mucha inflación debajo de la alfombra», afirmó Diego Giacomini, economista Jefe de la consultora Economía & Regiones. «Falta un montón del traspaso a precios de la devaluación. Si el dólar subió 130% y los mayoristas solamente 75%, y los minoristas 50%, falta un montón del traspaso a precios del aumento del dólar», explicó.
Según sus cálculos, a los precios minoristas sólo se trasladó un 43% y a los mayoristas, 60%.
«La inflación de 2019 se va a parecer más de lo que se piensa a la inflación de 2018. La inflación va seguir con tendencia creciente como viene ocurriendo», explicó Giacomini. Entiende que la tendencia que hay que mirar es la de dos años: «La inflación 2020/2019 será mayor que la 2019/2018 y ésta será mayor que la 2018/2017».
Un informe del IERAL de la Fundación Mediterránea, recordó que en 2016 se trasladó 61,5% de la devaluación a precios, por encima de sólo el 41% en 2018. «Queda margen para que otra fracción de la devaluación se traspase a precios en estos primeros meses de 2019, a lo que hay que sumar el ajuste de tarifas entre enero y abril, que por sí solo aportaría 1 punto mensual al índice», advirtió.
¿Pueden absorberlos los empresarios? «Los márgenes empresariales y los salarios se han comprimido en esta experiencia devaluatoria respecto de 2016. Parte de esta inflación de enero y febrero que está por arriba de lo que el gobierno y el REM preveían, en parte, puede ser explicada porque las empresas ven un poco mejor la demanda y tratan de recuperar los márgenes, es un proceso paso a paso», dijo Vasconcelos.
«Parte de la resistencia de la inflación a bajar se puede deber a que como hay bastante margen de recuperación pendiente por parte de las empresas, apenas notan un poco de demanda, pueden mover a precios. Pero como a su vez muchos sectores siguen con la demanda baja, tampoco puede ser algo generalizado», agregó Vasconcelos.