El mandatario habló de «hipocresía» y expresó que «el cannabis era para gran parte de la sociedad una palabra prohibida».
Luego del aval que le diera el Congreso, Alberto Fernández promulgó formalmente la ley de Cannabis Medicinal y Cáñamo Industrial, junto al ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, uno de los impulsores del plan.
“Este es otro triunfo de la sociedad contra la hipocresía”, dijo el Presidente, y comparó la norma con la ley del Divorcio, en tiempos de Raúl Alfonsín, del Matrimonio Igualitario y de la IVE, la ley de aborto.
El mandatario expresó que “el cannabis era para gran parte de la sociedad una palabra prohibida”, aunque, en lo personal, se pronunció “muy liberal en este tema”. Destacó que la norma fue fruto de “un gran consenso”.
“Hoy estamos acá poniendo en marcha una ley que ha sido el resultado de un gran consenso. Primero del consenso de quienes demandaron la ley que se organizaron, llegaron a las autoridades y dijeron ‘necesitamos una ley que deje de obligarnos a tener que tener plantas para producir el aceite para nuestros hijos’”, indicó, y añadió: “Dijimos ‘¿por qué no ponemos este tema en el Consejo Económico Social para que todos opinen?’ E hicimos una ley mejor. Con el aporte de los que la demandaban y los que entendían como podía ponerse en funcionamiento. Y después hubo que ir al Congreso, donde se impulsó y convirtieron eso en ley”.
Finalmente remarcó que se trata de una actividad que, además de la salud, “traerá dólares al país”.
“Estamos dando un paso muy importante en términos industriales, farmacológicos y en la salud. De gente que lo necesita y que ha probado en su propia experiencia que son medicamentos que sirven. Bienvenido sea pensar que detrás de toda esta ley va a haber una industria que dé trabajo, que produzca, que exporte, que traiga dólares. Que sane a la gente y fundamentalmente que mate a la hipocresía argentina”, remarcó.