La Dirección de Ambiente y Desarrollo Sustentable recomienda el empleo de envases y bolsas reutilizables para poder lavarlos y no desechar tanto plástico, disminuyendo la producción domiciliaria de residuos. De esta manera, el compromiso y la voluntad para separar sus residuos y disponerlos adecuadamente, facilitan la tarea de recolección y evita la proliferación de basurales protegiendo el ambiente en el que vivimos.
En estos días de aislamiento social, preventivo y obligatorio es importante la colaboración de toda la comunidad para disminuir la producción de basura y cuidar la higiene de la ciudad.
Para que nuestros materiales reciclables puedan ser recuperados y reinsertados en el sistema productivo debemos separar los residuos en nuestros hogares disponiendo por un lado los materiales reciclables y, por el otro, la basura.
Cabe recordar que la separación en origen es una práctica sencilla que tiene beneficios ambientales y sociales y en la que todos somos generadores de residuos en mayor o menor medida, por lo tanto, debemos hacernos responsables de su correcta disposición, de esta manera aportamos al desarrollo sustentable en social, económico y ambiental.
En este sentido, estos materiales se reintroducen en el sistema productivo como materias primas para la elaboración de nuevos productos y al aumentar el uso de material recuperado ayudamos a disminuir la extracción de materias primas.
Los elementos reciclables pueden depositarse en los veinte puntos limpios distribuidos por toda la ciudad o acercarse al Taller Protegido Pedro Echeverría, en Soler e Hipólito Yrigoyen.
En las campanas azules se reciben plásticos, vidrios, latas y tetrabriks y en las verdes, cartones y papeles secos que serán periódicamente retirados por personal de la Secretaría de Obras y Servicios Públicos para la clasificación y procesamiento de los materiales.
En cuanto a los residuos orgánicos tales como restos de fruta, verdura, flores, plantas, cáscaras de huevo y yerba, se pueden depositar dentro del propio patio o en una compostera para convertirlos en abono y tierra fértil.
Además, en los barrios que no cuentan con campanas en las cercanías podrán depositarse los martes, frente a los domicilios, dentro de una caja de cartón, identificarlos adecuadamente, para ser retirados por los camiones municipales.
