La resistencia a los antimicrobianos, como los antibióticos, es una amenaza para la seguridad sanitaria mundial y uno de los problemas de salud pública más urgentes de resolver.
La ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, se reunió este jueves con el embajador de Estados Unidos, Marc Stanley, para avanzar en la agenda de cooperación técnica y abordar las prioridades compartidas de salud pública, en el marco de la visita a Buenos Aires de Juliette Morgan, responsable de la Oficina Regional del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) en América del Sur, con sede en Brasil.
El objetivo es brindar apoyo en la detección, prevención y respuesta a la resistencia a los antimicrobianos y el fortalecimiento de los programas de prevención y control de infecciones.
Recientemente se incorporó a la Misión de los Estados Unidos en Argentina un equipo de expertas del CDC dirigido por la doctora Rachel Smith, quien se ha desempeñado en salud global durante los últimos doce años. Este equipo abordará la promoción de la salud y la prevención de infecciones, con un enfoque especial en la seguridad de los pacientes y trabajadores de la salud.
En este marco, Vizzotti mencionó los avances significativos de nuestro país para combatir la resistencia a los antimicrobianos, como el desarrollo del plan de acción nacional, el establecimiento de laboratorios nacionales de referencia y la implementación o mejora de los programas de vigilancia de RAM y de control de infecciones en los establecimientos de salud. Asimismo, expresó que “a pesar de estos esfuerzos, la resistencia antimicrobiana sigue constituyendo un desafío complejo y urgente que nos afecta a nivel global, regional y nacional”.
La responsable de la cartera sanitaria nacional repasó los logros obtenidos en las distintas líneas de trabajo para combatir la RAM, entre los que se destaca como un hito la sanción de la flamante ley y la ejecución del “Plan Nacional de Acción para el Control de la Resistencia a los Antimicrobianos” (PNA), coordinado por la “Comisión Nacional de Control de la Resistencia Antimicrobiana” (CoNaCRA), creada en 2015 e integrada por el Ministerio de Salud, el Ministerio de Educación, el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable como miembros permanentes, y las Sociedades científicas, colegios profesionales, sociedad civil, organismos internacionales (FAO; OIE; OPS/OMS; PNUMA), como invitados.
Por su parte, el embajador Stanley sostuvo que “la instalación de este nuevo equipo del CDC en Argentina ilustra el compromiso del CDC con la colaboración y la asociación entre Argentina y otros países de la región en la lucha para prevenir y controlar enfermedades, proteger a los pacientes y trabajadores de la salud, y promover la seguridad sanitaria en toda América del Sur. Esperamos seguir trabajando juntos”, dijo el embajador Stanley.
La experta del CDC Rachel Smith indicó que “la propagación de la resistencia a los antimicrobianos es una amenaza para la seguridad sanitaria mundial y esta amenaza no ha hecho más que crecer desde la pandemia de COVID-19. América del Sur ha visto un aumento en las tasas de resistencia a los antibióticos críticos que forman la columna vertebral de la medicina moderna. La colaboración, desde el nivel local hasta el regional, es fundamental para combatir la amenaza de la resistencia a los antimicrobianos en la región”.
La reunión concluyó con el compromiso asumido entre los funcionarios de fortalecer la cooperación técnica y el apoyo a los esfuerzos nacionales e internacionales para combatir la resistencia a los antimicrobianos.
Del encuentro participaron también el subsecretario de Estrategias Sanitarias, Juan Manuel Castelli; la directora nacional de Control de Enfermedades Transmisibles, Teresa Strella; y la coordinadora de Uso Apropiado de Antimicrobianos, Laura Barcelona. (DIB) ACR