El presidente estadounidense, Joe Biden, ordenó en las últimas horas a los servicios de inteligencia que le informen en los próximos tres meses si el coronavirus surgió por primera vez en China de una fuente animal o de un accidente de un laboratorio, teoría esta última que fue calificada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como “extremadamente improbable”.
Las agencias deben “redoblar sus esfuerzos para recopilar y analizar la información que podría acercarnos a una conclusión definitiva, e informarme en 90 días”, dijo Biden en un comunicado difundido por la Casa Blanca, horas después de que China acusara a su Gobierno de expandir tesis “complotistas” sobre el origen de la pandemia.
El mandatario consideró que las agencias están actualmente divididas sobre las dos posibles fuentes del virus que afecta al planeta desde el año pasado, con un resultado de más de 3,4 millones de muertos, una cifra que los expertos sostienen que es una subestimación y calculan que podría ser el doble o más.
Biden informó que en marzo pidió un informe sobre los orígenes de la enfermedad para saber “si surgió del contacto humano con un animal infectado o de un accidente de laboratorio”.
“A día de hoy, la comunidad de inteligencia estadounidense se ha centrado en torno a dos escenarios probables, pero no ha llegado a una conclusión definitiva sobre esta cuestión”, añadió el gobernante, citado por la agencia de noticias AFP.
La respuesta tiene inmensas implicaciones tanto para China, que dice no ser responsable de la pandemia, como para la política estadounidense, donde la teoría del laboratorio ha sido utilizada por los opositores republicanos para atacar a Beijing.
Por eso, China acusó hoy a Estados Unidos de expandir tesis “complotistas” sobre el origen de la pandemia.
Los primeros casos de Covid-19 fueron identificados a finales de 2019 en Wuhan, antes de que el virus se extendiera por todo el mundo.”Algunos en Estados Unidos difunden teorías complotistas e informaciones falsas, como la hipótesis de un error de laboratorio”, resaltó ante la prensa el vocero de la diplomacia china Zhao Lijian.
“Si Estados Unidos quiere ser realmente transparente, debería, como hace China, invitar a los expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para investigar en la base militar de Fort Detrick, así como en todos los laboratorios biológicos del mundo”, expuso Zhao.
China siempre han negado la teoría según la cual el patógeno surgió en un laboratorio, concretamente en el Instituto de virología de Wuhan, señalado directamente por el expresidente Donald Trump, quien, sin embargo, nunca presentó pruebas científicas.
Esta semana, un artículo del diario estadounidense Wall Street Journal volvió a avivar esta hipótesis y las peticiones para que haya una investigación profunda al respecto se multiplican, incluso entre la comunidad científica.
Tras pasar cuatro semanas en Wuhan a principios de año, un estudio conjunto de expertos de la OMS y chinos consideraron “extremadamente improbable” que el origen del virus fuera un accidente en un laboratorio. (DIB)
