Cambiemos tiene hasta cuatro candidatos en distritos del interior

Con la ecuación bastante resuelta en el Conurbano, en otras ciudades más lejos de La Plata las PASO podrían darse con varios nombres.
En el camino de sumar nuevas intendencias, el armado territorial de Cambiamos vive dos realidades diferentes. Mientras en el Conurbano los candidatos están más definidos, en el interior, por ahora, hay distritos donde la puja está bastante diversificada.
Como ya adelantaron fuentes del PRO y de Cambiemos, habrá PASO en los distritos donde el macrismo no gobierna y no se alcance la unidad entere los postulantes.
Hay un caso extraordinario que es Mar del Plata. Allí, si bien el intendente Carlos Arroyo es amarillo, hay muchas chances de que haya interna.
En “La Feliz” se anotan, para empezar, los diputados provinciales Maximiliano Abad y Guillermo Castello; el senador provincial Franco Bagnato; y el diputado nacional Guillermo Montenegro.
La pluralidad de nombres en algunos partidos quedó evidenciada en las últimas reuniones que tanto María Eugenia Vidal como Mauricio Macri mantuvieron con “sin tierra”.
Los “sin tierra” son aquellos hombres y mujeres que, siendo funcionarios, concejales, legisladores o militantes, quieren destronar a un jefe comunal de Unidad Ciudadana o del massismo.
En la Segunda, una de las pujas más atractivas será en Colón (21 mil electores), comandado por Ricardo Casi (UC). Allí, si todo sigue igual, habrá cuatro contendientes: Claudia Necco (UCR), Juan Carlos Lavatelli (FE), Jorge Luis Simonella (UCR) y Gabriel Di Vito (PRO).
La concejala Necco fue la que quedó segunda en 2017, por muy poco (36,3 contra 36,5 del kirchnerismo) pero hay que tener en cuenta que el justicialismo fue dividido, ya que Casi había jugado con Florencio Randazzo.
En esta sección también habrá tres nombres para buscar sacar de la gestión a Francisco “Paco” Durañona en San Antonio Areco (20 mil electores). En la tierra de los mejores pura sangre de carrera hacen fila Miguel Amadeo (PRO), Eduardo Jordan (UCR) y Francisco Ratto (vecinalismo).
En la Cuarta, hay otro póker de posibilidades para tratar de evitar un nuevo mandato de Walter Torchio en Carlos Casares (19 mil electores). Allí se anotan los autodenominados vecinalitas Omar Foglia y Andrés Aguirrezabala, María Lucas (PRO) y Raúl Andreoli (UCR).
El “Peli” Foglia fue intendente y diputado provincial y hace bastante que amaga con volver al ruedo. Pero los concejales Aguirrezabala y Lucas tienen para mostrar haber derrotado al oficialismo en 2017 con su lista.
En el Noroeste, también habrá una compulsa entretenida en Pehuajó (35 mil electores) con tres pretendientes. Como ya informó INFOCIELO, la previa se calentó cuando Vidal visitó la ciudad y se reunión con Mario Cumba, un outsider con el que el PRO quiere derrotar al ultra-k Pablo Zurro.
Para evitar que se transforme en un «terreno pantanoso” (eso significa pehuajó en guaraní), desde Gobernación y Casa Rosada no dejaron prestarle atención a la senadora provincial Felicitas Beccar Varela y al radical Pedro Goldemberg.
En la Quinta, además de la incertidumbre de Mar del Plata, hay que sumarle el cuarteto de apellidos que están inscriptos en la línea de partida para enfrentar al largo legado de De Jesús, hoy con Juan Pablo ocupando la silla de Mar del Tuyú. Hay tres radicales (Juan Ignacio Tobio, Flavia del Monte, Guillermo Magadán) y una lilita, Irma Mendoza.
En la Sexta y en la Séptima, los escenarios más interesantes se dan, en Daireaux (12 electores) y Bolívar (25 mil electores), respectivamente.
En “Deró”, de los cuatro anunciados, hay dos exintendentes boina blanca como Luis Oliver (1995-2009) y Esteban Hernando (2009-2015). Completan la nómina, para enfrentar a Esteban Acerbo, los macristas Juan Martín Capelle y Fernando Medina.
En Bolívar también se verán las caras dos pesados de la historia política municipio como el exalcade Gabriel Erreca –y actual presidente del Concejo Deliberante- y Juan Carlos Morán, actual titular del Registro Nacional de las Personas. Se le sumarían Ricardo Criado y Sandra Santos.
Erreca, no obstante, va por la revancha porque nunca ganó una elección Ejecutiva, ya que accedió al poder en 2009 –cuando Juan Carlos Simón se fue a la Legislatura- y en 2011 perdió con Eduardo “Bali” Bucca.