No es secreto para nadie medianamente informado, que tanto nuestros apellidos maternos como paternos, están vinculados desde hace no menos de tres generaciones a la militancia política y a la función publica.
En mi caso particular, he ocupado diversos cargos electivos y ejecutivos que no hace falta ahora detallar.
En cuanto a mi hermano Santiago, actual Gerente de la oficina de Anses local, con mas de treinta años de servicio en el organismo, su paso y actuación en la cartera de seguridad municipal no ha pasado desapercibida.
En lo personal y conociendo la pasión que le pone a las cosas, la suya, ha sido una gestión solvente, que será valorada en el tiempo y creo que difícil de empardar.
Así las cosas hemos forjado, a fuerza de trabajo y constante dedicación, un reconocimiento público que se traduce en aprobación general, pero también en vecinos que tal vez, no habrán evaluado positivamente como esperábamos nuestras gestiones.
Esto lo dejamos librado a la opinión individual de cada ciudadano.
Como ya es de conocimiento público, la actual administración municipal ha dispuesto cambios en su planta de funcionarios.
Sin lugar a dudas que el más sensible de ellos, es el referido a la Secretaria de Seguridad.
Me arriesgo a opinar, que los recambios dispuestos en el gabinete municipal, son producto evidente de fallas de gestión, errores de conducción, tal vez en lecturas incorrectas o en decisiones equivocadas, el último resultado electoral habla por si solo.
Ante esta última afirmación también, cada uno sacara sus propias conclusiones.
No es intención mía vulnerar conversaciones reservadas o resguardadas, pero lo cierto es que a Santiago le solicitaron en reiteradas ocasiones, desde el mismo entorno municipal, que volviera a ponerse al frente de la Secretaria de Seguridad.
Tal sugerencia fue sistemáticamente por él rechazada, nuestro consejo, no solo en sentido familiar sino además político, fue siempre e invariablemente el mismo, etapa por ahora cumplida.
Creo en esta ocasión expresar la posición de ambos, es nuestra intención dejar en claro que la designación de una militante política de apellido similar al nuestro al frente del área de seguridad municipal no tiene en absoluto que ver con nuestro entorno familiar.
Es habitual confundir apellidos, pero resultaría decepcionante para todos confundir gestiones, tareas o resultados ya cumplidos, con los que puedan darse en el futuro.
Le deseamos la mejor de las suertes a la nueva funcionaria en su flamante gestión, su éxito será una bendición para todos los chascomunenses.
Aprovecho la oportunidad para desearle a usted y a sus lectores un excelente año nuevo.
Marcelo Muscarello
17.076.896
Chascomús, Enero de 2022