Terminó la segunda semana de audiencias con el testimonio de un joven que fue víctima de una golpiza por parte de Lucas Pertossi.
Con el testimonio de dos bomberos que asistieron a Fernando Báez Sosa tras ser golpeado a la salida del boliche Le Brique y un joven de Zárate que contó las agresiones que sufrió por parte de Lucas Pertossi, uno de los rugbiers acusados, cerró la décima jornada del juicio que se lleva adelante en Dolores.
El proceso por el crimen de Báez Sosa continuará el lunes, con las esperadas declaraciones de Juan Pedro Guarino (22) y Alejo Milanesi (23), dos adolescentes que eran parte del grupo agresor pero que fueron absueltos. Fue el abogado defensor Hugo Tomei, quien pidió adelantar el día que se sentarán ante el tribunal, ya que estaba previsto que sea el miércoles 18, justo cuando se cumplen 3 años de la muerte de joven.
De la jornada de este viernes uno de los testimonios más fuertes fue el del testigo Pablo Gastón Zapata, quien dijo que Lucas Pertossi, uno de los ocho acusados, lo interceptó en la ciudad bonaerense de Zárate y lo amenazó de muerte y con robarle a moto. “Te voy a matar hijo de puta, te voy a robar la moto”, dijo el testigo al declarar ante el Tribunal Oral en lo Criminal 1 al referirse a quien, luego supo, era Lucas Pertossi.
Relató el encontronazo que tuvo un mes antes de lo9 de Villa Gesell con el rugbier, quien —según su testimonio— lo fracturó de un golpe. “Fue una patoteada. Primero recibí una golpiza, él (por Pertossi) junto a cinco o seis sujetos más. Me lo cruzo a los cinco días con algunos de esos sujetos, se me vienen encima. Uno de los chicos me abre paso para bajar la escalera (está en un bar) y Lucas Pertossi me pega una trompada. Caigo, me hago una fractura. Quedé saltando en una pierna”, dijo.
“‘Hijo de puta, te voy a matar, hijo de puta te voy a robar la moto”, le gritaba Pertossi. Según siguió contando, pidió a unos amigos que se fijen cómo estaba su moto. Pero para ese momento ya había desaparecido. Luego del testimonio, la fiscalía le mostró fotos de la moto (la que no había visto nunca más), y la reconoció. Las imágenes fueron extraídas del celular de Lucas Pertossi.
“Sin vida”
Previamente, habían declarado dos efectivos del cuerpo de bomberos voluntarios de Villa Gesell que ante un alerta llegaron a la puerta del boliche para asistir a Fernando y contaron que lo encontraron ya “sin signos vitales.
Verónica Onieva y Javier Timoteo detallaron que tardaron cerca de dos minutos en llegar al lugar tras el llamado que advertía sobre una persona inconsciente frente Le Brique, situado a cuatro cuadras del cuartel.
“Llegamos, estacionamos en frente, cruzamos, nos encontramos con persona en el piso a la que le estaban haciendo RCP, intervenimos nosotros”, narró Onieva. Y añadió: “Uno de los nuestros compañeros comenzó a hacerle RCP, le conectamos el DEA (dispositivo que asiste la maniobra de reanimación). El DEA escaneó, nos dijo que continuáramos con RCP. A los 10 minutos llegó la ambulancia con la médica, los ayudamos a subir al paciente a la ambulancia. Nunca tuvo signos vitales”.
Por su parte, Timoteo recordó que cuando llegaron al lugar había una chica haciéndole RCP. “Yo soy ambulancionero además y la vi a la chica que estaba bien posicionada, y cuando ya se hizo cargo bomberos, le pusimos el DEA, le tomamos los signos vitales. No tenía signos vitales”, ratificó.
Al igual que en todas las audiencias previas, el debate fue presenciado por Graciela Sosa y Silvino Báez, padres del estudiante de abogacía asesinado.
También estuvieron presentes, pero en el banquillo de los acusados los ocho imputados, Máximo Thomsen (23), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23), Blas Cinalli (21), Ayrton Viollaz (23), y Luciano, Ciro (22) y Lucas Pertossi (23). (DIB)