Axel Kicillof pasó por la ciudad de La Plata para decir entre otras cosas que estará la mayor parte del tiempo en La Plata, porque La Plata es justamente la capital bonaerense. Y al pasar, en conferencia de prensa, buscó diferenciarse de María Eugenia Vidal, quien suele mantener reuniones en las oficinas porteñas de Retiro o el microcentro. También aprovechó para bajar el tono, para mostrarse más amigable que anoche. Crítico, pero menos efusivo
Así empezó la semana del electo gobernador, quien a partir del 10 de diciembre deberá manejar los hilos de la administración más difícil de todas, la de la provincia de Buenos Aires. Antes, según él mismo comentó, tuvo la oportunidad de charlar por teléfono con la mencionada Vidal, ya que anoche, en medio de los festejos y la locura, el intento de comunicación de la mandataria resultó infructuoso.
La cita fue en las oficinas del Frente nacional Peronista de la calle 10, donde manda el diputado Julio Pereyra (PJ Unidad y Renovación), el único de los presentes que no sentó en la conferencia de prensa. Claro, tanto antes como después, compartieron unos minutos que no alcanzaron mucho más que para la foto. En esa pequeña reunioncita la que no estuvo fue Giselle Fernández, la hermana de Cristina, que sí estuvo en la conferencia (en segunda fila, como fan).
Volviendo a Vidal, a fines de esta semana es muy probable que se vean las caras por primera vez desde la elección. Será el inicio de la transición o de la previa de la transición, la cual señaló la ex jefa de Gobierno porteño se desarrollará en paz y ordenadamente. Lo mismo espera la gente del ex ministro de Economía, aunque primero quieren saber con qué se van a encontrar, qué les va a dejar elactual Ejecutivo, área por área.
Para eso en los próximos días -quizá hoy o mañana- se terminará de definir el denominado «equipo de transición», que estará conformado por parte de los Kicillof boy’s, los mismos que trabajan a diario con el ya ex candidato, los mismos que se encargan de los trabajos vinculados a la economía, a la seguridad, a la educación, etc.
De ese equipo, claro, formarán parte varios de los futuros ministros y/o ministras, aunque todavía nadie suelta prenda alguna. Ni rumores, ni confirmaciones, nada. La gente de Kicillof, salvo el Secretario de Comercio Interior, Augusto Costa, que dijo en una entrevista que iba a ocupar un cargo importante en el futuro gobierno, prefieren no referirse a lo que viene.
«Acá se sienta el Gabinete», bromeó un periodista en la conferencia. «No, se sienta el equipo de Axel», respondió entre risas Carlos Bianco, el dueño y conductor del Kicimóvil, que desde hace un buen tiempo suena como posible jefe de Gabinete y como él mismo contó ante este medio (previo a los comicios), trabaja fuerte en los temas vinculados a la Seguridad, a la actualidad de la Policía bonaerense, al delito, el narcotráfico.
Junto al equipo de trabajo también se sentaron varios de los intendentes e intendentes electos. Entre ellos, Mayra Mendoza (Quilmes), Nicolás Mantegazza (San Vicente), Javier Gastón (Chascomús), Hernán Y Zurieta (Punta Indio), Mario Secco (Ensenada), Santiago Maggiotti (Navarro) y Andrés Watson (Florencio varela), entre otros.
Todos los mencionados y el resto de los sesenta y dos alcaldes electos del Frente (a partir del 10 de diciembre serán 70) serán convocados entre esta noche y mañana a un gran cónclave a llevarse a cabo posiblemente el miércoles, en el que se realizará un repaso de los comicios y se empezará a pensar en lo que viene, en la gestión: «Este será un gobierno de gestión, no de marketing», suele repetir Axel.