El presidente Alberto Fernández recibió hoy a la cúpula de la Iglesia que se puso a disposición del Gobierno para colaborar en la emergencia sanitaria decretada por la pandemia del coronavirus y se evaluó ampliar las excepciones del decreto de cuarentena obligatoria para que los sacerdotes puedan salir a visitar enfermos o atender a los sectores desportegidos.
Fue una reunión cordial que duró una hora y se abordaron todos los temas de la pandemia que afecta el mundo y la Argentina. El Presidente recibió al titular de la Comisión Episcopal Argentina, monseñor Oscar Ojea, a Carlos Malfa, Secretario General de la CEA y obispo de Chascomús y al arzobispo de Buenos Aires, moseñor Mario Poli.
Desde su despacho en la quinta de Olivos el jefe de Estado hizo un repaso ante la cúpula eclesiástica de todas las medidas que tomó el Gobierno para mitigar el virus y la explicación de por qué se tomó la decisión de decretar una cuarentena obligatoria.
“La Iglesia se puso a disposición del Gobierno, planteó un firme acompañamiento espitritual y acordó que pondrá a disposición de la estructura del Estado todos los centros de Cáritas y las parroquias para asistir a los que menos tienen”, explicó a Infobae un funcionario de la Casa Rosada.
Las fuentes de la Comisión Episcopal consultadas también coincidieron en el mensaje de respaldo que llevó la Iglesia al Gobierno y en la decisión de los sacerdots de colaborar con el Estado en la ayuda espiritual y material de los más necesitados.
En este sentido, también se habló de la necesidad de la Iglesia para que el Gobierno amplíe las 24 excepciones a la cuarentena decretadas ayer y se incorpore a los sacerdotes en esa grilla para que estos puedan movilizarse no sólo a los centros asistenciales de alimentos sino también a los hospitales para atender espiritualmente a los enfermos.
Además del presidente Alberto Fernández, en el encuentro con la cúpula eclesiástica estuvieron el secretario de Culto, Guillermo Oliveri y el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz.
La Iglesia realizó una misa en Lujan poco después del mensaje del presidente Alberto Fernández donde se anunció el envio del proyecto sobre el aborto (Nicolás Stulberg)
El mensaje de apoyo que hoy ofreció la Iglesia al Gobierno en este momento de grave crisis sanitaria que afecta al mundo y a la Argentina estuvo en línea con los comunicados que emitió recientemente la Conferencia Episcopal Argentina desde que empezaron a verse casos de contagiados y muertos en el país.
En este sentido, el último mensaje público de la cúpula de la Iglesia se planteó la necesidad de enfrentar la pandemia con “cuidado y responsabilidad” y destacó “vivir esta crisis como una oportunidad para crecer como personas y como sociedad”.
También la Iglesia, en coincidencia con el mensaje del Presidente, destacó “el distanciamiento social como medio de prevención puede estar acompañado de una gran cercanía espiritual de modo que aunque físicamente asilados, nadie se sienta solo”.
A la vez, se supo que en la reunión con el Gobierno se mencionó que las Iglesias de todo el país estarán cerradas en su gran mayoría para respetar la cuarentena y no se dará misa. Pero se evalúa un esquema de misas virtuales en algunas parroquias y en las redes sociales que maneja cada parroquia.
En relación a la ayuda social a los sectores vulnerables en esta cuarentena la Iglesia había dicho que en los más de 4.400 barrios carenciados del país viven varios millones de personas y alertaron que “a estas personas no les va a resultar muy fácil quedarse en sus casas ya que necesitan salir para ganar el pan para sus familias día por día”.
Esta también es una preocupación que compartió el Presidente y como contrapartida a ello les dijo a las autoridades de la Iglesia que ya se habían tomado medidas económicas para aumentar los fondos de los planes sociales y para contener a los sectores desprotegidos.
De todas maneras, en la reunión de hoy en Olivos tanto Ojea como el Presidente coincidieron en seguir apuntalando el trabajo del ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, en la asistencia alimentaria para los más necesitados. Así, la Iglesia actúa como un fuerte pilar de apoyo con la estructura de Cáritas y de las parroquias de todo el país.
El encuentro de hoy del Presidente con la cúpula de la Iglesia distó totalmente del clima de tensión que se había vivido hace un mes cuando Alberto Fernández anunció ante el Congreso la decisión de enviar el proyecto de ley de despenalización del aborto y unos días más tarde hubo una misa en la Basílica de Luján convocada por los obispos para rezar por las dos vidas y rechazar la iniciativa del Gobierno.