Como parte de las medidas acordadas entre el Gobierno nacional, el de la Ciudad y el de la provincia de Buenos Aires, el secretario de Transporte porteño, Juan José Méndez, dijo que se intensificaron los controles en las cabeceras de los ferrocarriles, en los colectivos y en el subte
El secretario de Transporte porteño, Juan José Méndez, dijo esta mañana que se intensificaron desde hoy los controles en las cabeceras de los ferrocarriles, en los colectivos y en el subte como parte de las medidas para contener el avance del coronavirus acordadas entre el Gobierno nacional, el de la Ciudad y el de la provincia de Buenos Aires.
«Continúan las mismas medidas restrictivas: en el transporte público viajan trabajadores esenciales y empezamos implementar a partir de estas 48 horas un control más intensivo en conjunto con la Provincia y el Gobierno nacional», afirmó a Radio Continental Méndez respecto al mayor control en la circulación de personas que comenzó a implementarse este miércoles.
En ese sentido, el funcionario detalló que personal de Gendarmería, Policía de la Ciudad y Federal colabora en los operativos en las 69 estaciones de trenes de la región metropolitana «para fiscalizar que todos aquellos que utilizan el transporte estén autorizados para hacerlo».
«Este control lo replicaremos en 57 cabeceras de colectivos o centros de transbordo en el conurbano, en 12 estaciones de la Ciudad y en 17 cabeceras de subte, que son las que concentran la mayor cantidad de pasajeros», agregó el funcionario porteño.
Respecto de la reunión entre las autoridades bonaerenses, de Nación y Ciudad, Méndez aclaró que ayer acordaron que la forma la más exitosa de fiscalización «sería focalizar por la mañana en las estaciones del Gran Buenos Aires y, por la tarde, en las estaciones cabeceras de ferrocarriles de la ciudad de Buenos Aires».
De todas formas, insistió en la responsabilidad individual para cumplimentar el distanciamiento social en la vía pública.
«Hacemos un llamado a la responsabilidad individual, si se tienen los permisos tenemos la responsabilidad de mantener el distanciamiento social en el viaje y si un colectivo viene lleno, hay que dejarlo pasar y tomar otro», dijo.
En caso de que alguna persona carezca del permiso para circular, Méndez explicó que «se le denega el ingreso al transporte público, se los hace bajar en otros casos y se les solicita que vuelvan a sus casas o en casos de no colaborar, se aplican multas que van de 10 mil a 80 mil pesos».
En cuanto al aumento de la movilidad en la Ciudad, Méndez sostuvo que «en la última semana la circulación creció 3 ó 4 por ciento respecto de la semana anterior».
«Hay un tercio de la gente de la región metropolitana, lo que significa un 32% y nuestra expectativa es que no aumente y se mantenga en trabajadores esenciales», aseveró.
La circulación de vehículos particulares es de 51% con respecto a el movimiento antes de la pandemia y, según dijo Méndez, es el transporte «que más creció» ante la recomendación de que, quien tiene la posibilidad de hacerlo, se movilice con automóvil o en bicicleta, aunque, en cualquier caso -subrayó el funcionario- «hay que hacerlo con el permiso». (Telam)