Intendentes, legisladores y dirigentes del histórico partido comenzaron a diferenciarse políticamente de sus pares del macrismo.
Uno de los últimos en hacerlo fue el jefe comunal de Chacabuco, Víctor Aiola, que aseguró que «el radicalismo deberá tener mayor protagonismo en esta nueva etapa de Juntos por el Cambio», al igual que su par de Magdalena, Gonzalo Peluso, que subrayó la necesidad de «tener un espacio más horizontal».
Desde el Congreso, el diputado nacional Alejandro Echegaray lamentó también que «en los últimos años la alianza ha estado muy amarilla y genuflexa al poder central».
La idea no es nueva, de hecho la propusieron referentes como Ricardo Alfonsín o Juan Manuel Casella, hoy alejados de la alianza oficialista, o distintos convencionales con menos revuelo mediático.
“El radicalismo ya empezó a tener un papel más protagónico y me parece que se tiene que hacer política desde el territorio y respetar la territorialidad”, precisó el intendente de Chacabuco y agregó: “Todos deben saber que sin territorio es muy difícil hacer política”.
En tanto, Echegaray le comentó a este medio que «se viene una etapa distinta porque ya no hay un elemento disciplinador como el Gobierno nacional o provincial que emita ordenes o acatamientos automáticos».
«El partido tiene que tomar mayor identidad y en eso va a jugar mucho la territorialidad, pero me parece también que será una territorialidad no sólo entendida como caudillismo, sino como lo que siempre fue el radicalismo, dentro de un proyecto nacional con liderazgos nacionales», agregó el legislador.
Asimismo dijo que «no sabe» si habrá una ruptura dentro de la alianza oficialista, pero que «no hay ningún contrato de perpetuidad con ninguna fuerza». «Esperemos que se pueda seguir construyendo desde las diferencias», concluyó.
Por su parte, Peluso remarcó que «más allá del territorio siempre se puede hacer política», aunque aclaró que «es más fácil teniendo el Gobierno».
«De todos modos nuestra alianza tiene que seguir vigente hasta 2021. Si nos dividimos perdemos la mayoría en el Senado y es lo mismo en el Ejecutivo. No es lo mismo tener 50 intendentes que 30», sumó el jefe comunal, y coincidió también con sus pares en la idea de «tener un frente electoral más horizontal».